ACTUALIDAD –SEMANA 362 – MIÉRCOLES, 21/3/2018

El sol quiere pero no puede y el frío se niega a hacerle caso. Así que, como decía mi abuela, tú sigue con el chip de invierno que hasta el cuarenta de mayo no hay que quitarse el sayo. A lo que iba. Hemos emprendido el camino nuevo de Bertamirans en medio de una preciosa alborada que sería primaveral si no fuese por la temperatura que nos llega desde las tierras que domina Putin.

Pero el calor que te contagia mi gente con sus sabias y cariñosas palabras derrite el hielo siberiano. Hoy, sin ir más lejos, me dijo Manuel…

—- Tes que facerte ver mais pola aldea que a xente pregunta por ti, por si andas mal.

Ocurre que mis horarios no son coincidentes. Pero prometo volverme más sociable y adaptar mi siesta a la de la gente normal, para disfrutar de esas conversaciones que se suceden en los caminos, que es donde nos manifestamos como tú lo haces las calles de la city.

A ver. Preocupa y mucho que la gente se vaya porque no hay trabajo…

—- La vida sigue igual, Mariano, no ha cambiado nada. No nos mientas.

Leyendo los datos del Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero, más conocido por PERE, me entero de que siguen subiendo las cifras de los que se van, que estos ya parecen los tiempos del éxodo de aquella dictadura de hambre. Ya hay 2.482.808 personas con nacionalidad española que residen en el extranjero, a pesar de los que regresan de Venezuela, México y Argentina por cómo andan las cosas por allá.

Lo grave es que quienes vuelven son los abuelos y los que se van son los jóvenes que pertenecen a la generación tecnológica, la más preparada de nuestra historia… ¡Así no se hace patria!

En cuanto a las pensiones, Mariano, deja de confundir al personal diciéndole que les estás dando una propina porque han llegado a viejecitos y te resultan simpáticos. Te repito…

—- Somos viejos pero no somos tontos.

Lo que nos paga el Estado nos lo hemos ganado a pulso trabajando como burros durante los mejores años de nuestras vidas y cotizando una jugosa parte de nuestro sueldo para que no nos mate ahora el hambre, que es lo que va a ocurrir como sigas tu de presidente.

¿Para qué queremos tanques nuevos? ¿Y esas fragatas? ¿Y esos aviones? ¿Y esas motos de la Guardia Civil para multar a la gente? ¿Y ese submarino que no navega?

Yo te lo diré…

—- ¡Con los pensionistas no hay tres por ciento!

Y puede que a algunos les interese mas gastar el dinero público en armas que en el bienestar de los ciudadanos, la prioridad de todo político bien nacido.

Te contaré otra historia, Mariano. Como siempre has sido un chapón te crees que los que no somos notarios como Cabanillas somos unos mierdecillas de los que hay que pasar. La Gente siempre te importó nada y lo único que te guió en la vida fue tu “carrera” política.

Te equivocaste y te sigues equivocando.

El bofetón aquel de Pontevedra fue la primera muestra de la indignación que se palpa contra ti en tu propia ciudad. Escucha, escucha esta conversación en el Carabela…

—- Mariano me ha defraudado.

—- En realidad nunca fue un figura.

—- Yo no sé cómo pudo gobernar tan a espaldas de su pueblo.

—- Debería dejar paso a Feijóo.

Los que hablaban eran el camarero, el de siempre, ese que te sonreía tanto al ponerte el cafecito y un coleguita tuyo del PP pontevedrés, gran admirador de Fraga.

Por Santiago se da como seguro el próximo desembarco de Alberto en Madrid y en la Xunta, mis confidentes, ya le ponen fecha: “será después de las municipales y europeas del 2019”. Así que supongo que te dejarán dos años más para que sigas jodiendo al personal, que eso es lo tuyo.

Alberto conoce bien Madrid y sí que es buen gestor. No porque lo diga yo, sino porque lo ha demostrado en el Insalud, en Correos y ahora al frente de la Xunta de Galicia.

Porque una cosa son los partidos y su aparataje, incluso los dimes y diretes parlamentarios,  y otra bien distinta lo que piensa la gente: los de derechas dicen que ha superado a Fraga y los de izquierdas se mueren de envidia por no tener un líder como él, que los buenos ya pasan de la edad.

Hay que reconocerte un mérito, Mariano. Lo de provocar a los catalanes para que se montara semejante lío ha sido una jugada maestra. Supongo que te lo habrá sugerido alguien porque eso de meter ponzoña no va contigo. Tu solo esperas que pase el cadáver de tu vecino por delante de tu puerta… —- ¡Como hacía Cabanillas!

Pero ten cuidado, Mariano. No olvides que en tu partido esa es vieja técnica política.

Y aquí termino hoy, que no tengo tiempo para más porque he de plantar las flores de verano, esas que ponen color a mi vida en el edén que comparto con Gloria, que es la raíz de mi vida.

Te dejo una postal, como siempre…

Entre Os Peares y Belesar, los dos saltos hidroeléctricos más emblemáticos de la cuenca del Miño, el trayecto del río es espectacular y se puede remontar en catamarán. Al paso de la embarcación se aprecia bien el cultivo del vino, el magnífico bosque de ribera, el descenso de otros pequeños cursos fluviales y sobre todo, como se escondían los eremitas entre la vegetación, para construir sus conventos e iglesias.