Carracedo

La plenillanura de la Chaira celanovense

A Chaira celanovense.

Carracedo no era mas que un campo dificil de cultivar que se asentaba en la plenillanura da Chaira, hasta que se hizo el sendero turístico.

Se llega hasta Carracedo por Amoroce, la parroquia. Desde allí se asciende hasta A Chaira, que aún tendremos que dejar atrás por Cubreiros, A Rotea, Santa Eufemia, A Magdalena, San Martiño y  O Carballo.

Pocos habitantes quedan ya en todas estas aldeas en las que los niños, decía Risco, nacían con una maleta; aunque algunas resistan con terquedad el paso del tiempo.

Aquí nos conmueve el canto rumoroso del agua de la fuente, las viejas casas de piedra y las arterias que las unen. Las aldeas son fantásticas pero poco habitadas, a juzgar por las escasas chimeneas de piedra que humean, pese a la leña de souto que abunda en este entorno.

Me contó Manuel Laborda que, antes de emigrar a Chile, bajaba con su padre y sus hermanos, todas las semanas, a hacer las compras a Celanova, la capital municipal y comarcal, donde nacieron grandes poetas como Curros Enriquez, el involdidable Celso Emilio Ferreiro o el genio más actual de nuestras letras, Mendez Ferrín. El flamante presidente de la Real Academia Galega es de Vilanova dos Infantes, uno de los emblemas turísticos de Ourense.

De verdad que deseo que Manuel y sus hermanos puedan volver a esta Tierra de piedra que les vio nacer y en la que tienen todo el derecho a vivir.

Vilanova dos Infantes.