galiciaunica Un recorrido semanal por Galicia, España.

COMO “HACERLO” DE FORMA MAS SALUDABLE

Por Marola Seijo

LOS HOMBRES LO HACEN DE PIE…

La mala puntería de los hombres en el baño es un motivo frecuente de conflictos. En Alemania llegó incluso a juicio cuando en 2015 un individuo denunció a su casero por negarse a devolverle la fianza a causa de los daños que la orina del inquilino había producido en el suelo del baño. Y aunque el tribunal resolvió a favor del inquilino, lo cierto es que el bando de los hombres que prefieren sentarse para orinar parece crecer, sobre todo en Asia, pero también en Alemania o Suecia: en este último país, una moción obligó  a los responsables públicos de un condado a ceñirse a esta postura en los baños de la sede del organismo.

El argumento de la limpieza es innegable. Sin embargo, en internet circula la idea, también esgrimida por el partido sueco, de que orinar sentados mejora la salud sexual de los hombres. No hay mejor reclamo para vender una idea, pero en este caso no hay ninguna ciencia que la respalde. Sin embargo, sí es cierto que para los hombres de cierta edad que comienzan a padecer problemas de próstata la postura sedente mejora el flujo de la micción, reduce el tiempo necesario y vacía más la vejiga, según un amplio estudio de 2014 que reunió y analizó los datos de 11 trabajos previos. Y dado que el síndrome prostático afectará a más del 40% de los hombres en sus años futuros, ¿qué tal si empezamos a sentarnos ahora?

…Y LAS MUJERES SOBREVUELAN LA TAZA.

De acuerdo, orinar sentados puede ser beneficioso, al menos para ciertos grupos de población. Y dado que las mujeres siempre lo hacen así, no hay nada que comentar. ¿O sí? Lo cierto es que las mujeres se sientan en los baños privados, pero en los públicos a menudo más bien sobrevuelan la taza; adoptan forzadas posturas de media flexión para no entrar en contacto con ese albañal de fluidos inciertos que es la tabla del retrete.

¿Cuál es la alternativa? Tal vez para las más escrupulosas no sirva de mucho el argumento de que sentarse en un baño público puede resultar desagradable, pero en general no es peligroso para la salud. Para ellas hay una opción que es tan válida para las mujeres sanas como para los hombres sanos: orinar de pie. Aunque esta postura resulte extraña para las mujeres, un estudio  de 2010 mostró que el vaciado de la vejiga es igual de eficaz. Por el contrario, el «sobrevuelo» puede dejar más cantidad de orina sin evacuar, lo que favorece las infecciones de vejiga. Y ya no hay impedimento anatómico: allí donde no llega la naturaleza, llega la tecnología; hay varios dispositivos en el mercado que permiten a las mujeres orinar de pie con total comodidad, una opción siempre aconsejable para los baños públicos.