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HAY QUE VER COMO GANA DINERO ALGUNA GENTE

Con el temporal presente, el viento silbando sobre mi cabeza y la lluvia llamándome desde los cristales de la ventana, lo que me viene a la mente es ese hombre del que dicen los íntimos –unos pocos- que ni olvida ni perdona. Me refiero al presidente del Real Madrid cuyas prácticas serán muy legales pero la apariencia de las operaciones que ha realizado en los últimos tiempos indica que no es un tipo fiable.

Recordarás que él quería a Neymar de blanco pero se le adelantó su eterno rival y desde entonces no dejó de sufrir. Incluso cuando el Barsa ingresó 222 millones de euros procedentes de Qatar, al pagar el PSG la clausula del brasileño y llevárselo a la capital francesa.

Por cierto, este fichaje fue el que inició el desmadre del mercado futbolístico y también el que focalizó la atención sobre los patrones de las estrellas entre los que se encuentra Florentino Pérez.

Como quiera que el club que preside se embarcó en la aventura económica de gastar 600 millones para hacer un nuevo Estadio Bernabeu, dejó de fichar cracks insustituibles para fijarse en aquellos chicos brasileiros que dicen tienen madera para llegar al firmamento futbolístico.

Así compró a Vinicius al Flamengo y a Rodrygo al Santos. En Madrid se dijo que costaron 61 millones de euros el uno y 60 el otro, pero los presidentes brasileños juran que a las arcas de sus clubes solo llegaron 45 por Vinicius y 40 por Rodrygo. Es decir, que se perdieron por el camino 36 millones de euros.

Según “El Confidencial”, esos dineros fueron repartidos entre el empleado del Real Madrid, Juni Calafat, jefe de fútbol internacional; la agencia de Oscar Ribot, ex jefe de prensa del club merengue; y los padres de los jugadores.

Desde luego, algo huele a podrido en estas operaciones recientes del equipo que más presume de valores, de historia y de honradez. Un club que es, sobre el papel, de sus socios pero en el que para llegar a presidente tienes que ser antes multimillonario: así lo impuso una asamblea presidida por Florentino Pérez y su equipo habitual.