galiciaunica Un recorrido semanal por Galicia, España.

LA AGONÍA DE LOS ÚLTIMOS TRENES NOCTURNOS

Por Eugenio Eiroa

¡MENOS MAL QUE NOS QUEDA PORTUGAL!

El «Sud/Expresso Lusitania» (que une Lisboa y Hendaya) y el «Tren Hotel Lusitania» (que une Lisboa con Madrid) pueden convertirse, a la vuelta de poco más de un año, en los únicos trenes nocturnos, a operar en las madrugadas de la Península Ibérica. Cabría esperar que si Renfe finalmente suprime los trenes nocturnos que unen Galicia con Madrid y Barcelona, al menos utilice el excelente material de que está dotado «el Catalán» para mejorar y sustituir el actual material rodante de que dispone en la doble línea internacional que atiende en combinación con la CP, entre Lisboa y Hendaya / Lisboa y Madrid.

Renfe ya fue eliminando en España, uno a uno, casi todos los diversos trenes nocturnos de que disponía. Y en cuanto circule el AVE en la línea Madrid-Galicia, tiene intención de retirar los dos únicos trenes que llevan coches-cama y quedan aún operando (circulando solamente en territorio español). Se trata del «Tren Hotel Rías Baixas /Rías Altas» que une Madrid con Vigo y A Coruña y del «Tren Hotel Galicia» que une Vigo y A Coruña con Barcelona.

“EL CATALÁN”: LENTO PERO MUY CONFORTABLE


El tren que une Galicia y Barcelona demora nada menos que 14 horas y 54 minutos en cubrir el recorrido, si no hay retrasos como últimamente sucede y Renfe se ve obligada a devolver el dinero, total o parcialmente, a los pasajeros que reclaman.
Este tren, el que une Galicia y Barcelona, utiliza en sus vagones material de muy alta calidad, disponiendo, por ejemplo, de unas formidables butacas en primera clase, en donde imposible resulta no acabar echando un sueño. Junto a ello, además de las tradicionales cabinas de literas, ofrece departamentos individuales o con dos camas, en habitaciones de perfecta iluminación -incluso regulable en intensidad-, dotadas de televisión y cuarto de baño completo, con lavabo, wc y una ducha que funciona muy bien, además de ofrecer toallas, neceser con elementos de aseo, alfombra antideslizante para la ducha… No se puede pedir más en cuanto a calidad de los materiales y dependencias que el tren popularmente conocido por «el Catalán» ofrece.
Otra cosa es que Renfe cuide el servicio… El pasado día 30, el tren salió de Barcelona con una hora de retraso y el pasaje fue maltratado, hubo de estar en fila, de pie, durante 50 minutos, en un vestíbulo previo al embarque, sin apenas sillas, en la estación de Sants. El personal de Renfe no dió explicaciones y cuando a alguna señorita este periodista se la solicitó, la respuesta fue airada, extemporánea y ridícula. Nada se aclaró: en el panel luminoso se limitaron a colocar la palabra «Demorado», sin más. A la mañana siguiente, tomando café en el vagón otrora restaurante (ahora Renfe ya no ofrece allí más que un vulgar servicio de cantina con todo prefabricado), pusimos la oreja y escuchamos la conversación entre dos ferroviarios, en la que uno decía al otro, cómo el tren tardó en Barcelona una hora en arrancar porque la máquina que inicialmente iba a hacer el servicio tenía el sistema de frenada de aquella manera, por lo que habrían tenido que sustituirla por otra… de ahí el retraso.

Renfe sostiene este tren entre Galicia y Barcelona a la espera del AVE (entre Madrid y Galicia) y porque intentos sugiriendo la eliminación de este actual servicio se tradujeron en duras advertencias por parte de políticos y ayuntamientos por donde pasa, exigiendo su mantenimiento. Pero ya veremos cuánto dura «el Catalán»…
El tren tiene clientela. Hay muchos gallegos y gente de El Bierzo emigrados en Barcelona -jubilados actualmente- que usan este tren para venir con frecuencia a sus aldeas. De ahí las numerosas paradas que el tren tiene en territorio galaico y proximidades (Ponferrada, O Barco, A Rúa, Quiroga, Monforte…). Si en un futuro próximo se elimina el tren nocturno que nos ocupa, es claro que cientos de personas usuarios habituales se verán afectados, porque un Ave entre Barcelona y Madrid mas otro en enlace entre Madrid y Galicia, además de caros, no van a parar en los lugares en donde «el Catalán» para; ni siquiera pasar por ellos…

Será posiblemente una burrada -si llega a producirse como algunos prevén- eliminar «el Catalán»; pero afectos al servicio ferroviario, consultados por quien esto escribe, no se cansan en repetirnos que a este tren nocturno, y al otro que también aún queda, entre Vigo/A Coruña y Madrid, les quedan dos telediarios…

El tren hotel Galicia/Barcelona recorre la espina superior de la Península Ibérica, Galicia-León-Palencia-Burgos-Logroño-Sur de Navarra-Zaragoza-Tarragona-Barcelona… Presta un indudable servicio. Y si el viaje es tan largo en horas, no es por el material que es de excelente condición fabricado por Talgo, arrastrado por las famosas locomotoras Siemens (compradas en el 2003 tanto por España como por Portugal y que tan buen resultado han dado)… El viaje es largo, porque la vía decimonónica  existente entre Vigo y Ourense, Ourense y Monforte y Monforte a León… ralentiza el paso de los trenes, hasta el extremo de en algunos lugares no poder circular más que a 60 kms/hora…

Si tenemos en cuenta que el AVE llega actualmente a León (y de ahí jamás pasará) desde Madrid, pero que de León hacia adelante (Ponferrada y acceso a Galicia vía Monforte) todo en cuanto a vías va a seguir igual, eliminar este tren nocturno tan bien dotado, es condenar a un peor futuro a una zona que, ya no solo ha de soportar no ver el AVE ni en pintura, sino también comprobar cómo poco a poco le retiran algunos de los otros trenes -aunque de servicios lentos- de que disponía.

Veremos qué sucede, pero en Ponferrada, A Rúa, O Barco, San Clodio/Quiroga, Monforte, Sarria, Lugo… hay gran preocupación por el futuro que viene en la temática que nos ocupa. Sería bueno que las ciudades de Ourense, Vigo y A Coruña hiciesen también suya la previsible protesta y tratar de consolidar este tren que buen servicio presta, evitando su desaparición, sin que haya una alternativa real para las poblaciones citadas en el inicio de este párrafo.

SENTENCIADO A MUERTE




Ya en el caso del otro tren nocturno, el que une Vigo y A Coruña con Madrid, hay algunas razones que justifiquen la decisión que se avecina en cuanto el AVE opere entre Madrid y Galicia (aunque la gran ventaja de aprovechar la noche para hacer el viaje, jamás podría negarse). De hecho, este tren nocturno, desde que fueron inaugurándose tramos del nuevo trazado ferroviario entre Madrid y Zamora (acortándose por tanto la duración de los viajes a Galicia), fue desviado vía Monforte, A Rúa, Ponferrada, León y Palencia, de tal manera que pasó a hacer un viaje más largo y de más horas, como para querer justificar así su condición de tren hotel. El tren sigue cubriendo el servicio, con notable ocupación y por lo general con puntualidad. Le redujeron las plazas sentadas (quedan escasas y los asientos no son muy confortables para viaje largo) pero la ocupación es notoria. Eso sí, el material que utiliza, aunque también Talgo, es de condición inferior al que se usa en el tren nocturno entre Vigo y Barcelona, aunque también hay cabinas con ducha y ciertas comodidades a tener en cuenta.

Si en el caso de «el Catalán» aún puede haber alguna esperanza de que el tren no desaparezca cuando el AVE una Madrid y Galicia, en el caso del nocturno que une Vigo y A Coruña con Madrid, las esperanzas son nulas. Le queda un año en el peor de los casos, año y medio en el mejor (si las obras finales del AVE se siguen retrasando).

EPÍLOGO


Para los románticos de los trenes, lo que se avecina es triste. Habrá quien diga: ¡Menos mal, aún nos queda Portugal! Pero casi tampoco… porque esos nocturnos portugueses ya no son lo que fueron. ¡Quien veía el Lusitania Express de antaño!.
Hasta el año 2012, el tren de Lisboa a Hendaya -que circulaba vía Salamanca- y el tren entre Lisboa y Madrid -que circulaba vía la frontera de Marvâo/Beira pasando por Cáceres- eran dos trenes independientes. Fue a partir del 2012 cuando Fuentes de Oñoro, Ciudad Rodrigo, Salamanca y Ávila pasaron a contar con un nuevo servicio ferroviario hacia Madrid y Lisboa, comenzando a partir del 15 de agosto, fecha en la que el Tren Hotel Lusitania, que enlaza a diario las capitales española y portuguesa, modificaba su ruta. A partir de ese día, este servicio nocturno operado de forma conjunta por Renfe y CP (Comboios do Portugal) pasaría a circular vía Fuentes de Oñoro en lugar de hacerlo como hasta entonces a través de la provincia de Cáceres.
Renfe señalaría que la decisión de cerrar la línea Torre das Vargens-Marvâo, en la línea Cáceres-Lisboa, por parte de Portugal, obligaba a realizar esta modificación en la ruta del Trenhotel Madrid-Lisboa que continuaría, no obstante, prestando el servicio entre ambas capitales.

Fue así como luego, desde otoño de 2012 que el TH Lusitania y el TH Surexpreso (Lisboa-Hendaya) se fusionarían y circulan así como un único tren entre Lisboa y Medina del Campo (Valladolid).

Ahora son, pues, dos trenes unidos que salen desde Lisboa; en Coimbra se suben unos cuantos pasajeros procedentes de Porto y del Norte de Portugal… el tren sigue como si fuese uno solo, hasta Salamanca, después de cruzar la frontera de Fuente de Oñoro / Vilar Formoso, una vez que sube por las tierras del excelente vinho do Dâo: Nelas, Tondela, proximidades de Viseu, luego ya Guarda… Ya en Medina del Campo, la composición se parte en dos trenes : uno va vía Ávila hasta Madrid, el otro tren parte de Medina del Campo, va por Burgos, hacia San Sebastián y Hendaya, para allí dejar que los viajeros finales puedan tomar el TGV y otros trenes franceses para irse hasta París y otras poblaciones.

Es lo que nos quedará… El doble tren «portugués» aunque con material español de Renfe, uniendo Hendaya y Madrid con Lisboa. Es lo que quedará para los últimos románticos… subirse a un tren en Madrid, en San Sebastián, en Burgos, en Ávila…. y tras dormir, despertar cuando la Siemens portuguesa arrastra aquello por la Lezíria abajo, buscando el estuario formidable del Tejo, después de pasar poco menos que tocando los ventanales de la legendaria plaza de toros de Vila Franca de Xira, a un paso de la siempre bella Lisboa.