galiciaunica Un recorrido semanal por Galicia, España.

LA TIERRA MAS AMADA

  EDICIÓN 200 ESPECIAL

1 RIA DE VIGO +

Aquel  viaje de ida fue por mar. En barcos del siglo XIX. Pero hace tiempo que hemos emprendido el regreso. Dicen que los gallegos estamos de vuelta en todo. Incluso muchos de nosotros… de vuelta en casa,  tras largos años de exilio obligado para algunos y voluntario para otros. Los sueños, sobre todo los americanos, siempre fueron tentadores para los habitantes de un País que quiere dejar de ser pobre. Ya conocéis esta historia, porque algunos sois sus protagonistas.

Sin embargo, intentaré contaros como puede ser el viaje de vuelta

2 COLLAGE GALICIA +

Sobre el cuadro de nuestras raíces, de vuelta, la historia pasará velozmente insertada en el paisaje cobrando forma de castro, de castillo, de pazo, de viejo monasterio o de iglesia románica de aldea. Son los recuerdos.

Y al cruzar cada puente, la naturaleza pintará los verdes de siempre en el lienzo de la montaña;  los brillos del agua clara en el lecho del río; y azules sobre otros azules en el mar que se deshace sobre la arena de la playa. Son los escenarios de tu infancia.

Yo te invito a volver a ti que eres mi viejo compañero de aventuras periodísticas en todo Iberoamérica o en la Europa a la que pertenecemos…

Y también a ti, lector amigo,  al que trato de tú por la confianza que nos regala a ambos esta Galicia Única que siempre te abre la puerta.

4 MONTAÑA, RIO,  PLAYA +

 El Origen

Habitaban los egobarros la mediamontaña del norte de Galicia y los oestrimnios el mítico monte Tecla… Los cigurros los valles de Valdeorras y el Macizo central. Y los albiones y zoelas, las montañas de Ancares… Navegaban nuestros dos mares los ártabros; y los limiagos buscaban el milagro del agua del gran lago de Antela… En el Pindo, los nerios adoraban al sol del Fin de la Tierra…

Son tan solo algunos de los más de cien pueblos galaicos de nuestras raíces, autores de las iniciáticas páginas de nuestra historia. Eran los habitantes de nuestros castros y los dueños de las tierras fértiles y del ganado que libremente pastaba en este confín de los verdes prados.

Los pueblos galaicos son nuestro origen más lejano en el tiempo.

Lo son hasta que, en la Edad de Bronce, protagonizaron aquellas primeras batallas contra los invasores saefes, los celtas; los hombres-serpiente.

Galaicos y celtas escribieron como principales protagonistas los más importantes episodios de la historia más antigua de este país.

3 ORIGEN +

La Tierra Que Más Amamos

Inviernos de nieve en sus montañas.  El país de la de la lluvia que enamora sobre la piedra y abre en la tierra, surcada por mil ríos,  un millón de fuentes. La que se mira en los espejos de cien lagos y se baña, a lo largo de dos mil kilómetros, en dos mares

En la Galicia Única el agua siempre nos invita a seguir su trayecto porque es el esencial motivo cromático del invierno, génesis de la atmósfera húmeda del paisaje del alma y el oasis perfecto para serenar los días de plata.

El agua es aquí un bien que no solo valoramos por su belleza… también es el origen de la vida.

5 RIAMONTE +

 El Paisaje

Es la estética de nuestra vida. De montaña, de bocarribeira, de valle, de costa, de mar, de río… Todos los paisajes de Galicia  se combinan manifestando su diversidad.

La atmósfera atlántica y cantábrica de sus dos mares. El prolijo tapiz vegetal de sus fragas. Los montes de las sierras, donde se esconde, incluso, la piedra básica de lejanos orígenes. O los valles, articulados en su amplitud por los ríos.

El paisaje de Galicia es muy hermoso porque alcanza la perfecta belleza de la armonía y encuentra siempre el paralelismo de las formas artísticas con el salto del agua. Y es el alma de la Tierra porque ostenta,  a su vez,  la huella de la historia…

6 CABO VILANO +

 La Montaña

Al final del sendero, siempre hay una cumbre desde donde el paisaje nos muestra la primigenia Galicia de la montaña, que es aquella en la que la gran mancha verde deja paso  a los picos escarpados.

Cada cima tiene nombre propio y en su entorno jamás crece la hierba mas allá de donde se lo permiten los rebaños de ciervos, corzos y gamos.

La montaña gallega pinta su mayor encanto natural en estas crestas de pastos, que se alzan hacia el cielo por encima del bosque y nos permiten ver todo cuanto existe en el territorio.

Abajo, los valles profundos sobre rocas enquistadas por la erosión de los ríos. Próximos a los penachos, los saltos del agua en libertad que buscan su destino final desde el precipicio. Y en lo más alto, los restos de antiguos glaciares rodeados de nieve.

Todo está a nuestro alcance siguiendo los viejos caminos que persiguen la hermosura infrecuentada….

7  MONTAÑA +

 El Valle

Los cielos visten de azul-gris sobre los valles de verdes y el tímido sol, entre sombras de niebla, atraviesa las degradaciones cromáticas de los árboles.

En los valles el esfuerzo imaginativo de nuestros  hombres y mujeres, hacen posible la transformación del sentir poético de las cosas en una actitud de trabajo colectivo que ya nos permite vivir… en el campo y de la tierra.

El paisaje del alma reverdece y bien se ve en él ese desarrollo sostenido de la producción agropecuaria. Esto significa la transformación del medio rural del País. Renace la vida campesina y crece a su lado la Galicia residencial.

Por las mañanas canta el gallo a dúo con cualquier intérprete latino salido del equipo de música. Al atardecer, el verde del prado  se tiñe de oro mientras nos asombra el campo cultivado.  Y por las noches, cuando sale  la luna, solo se escucha el silencio.

8 VALLE +

 Los Ríos

Nos entusiasman los cursos fluviales. Se cuentan por mil los ríos nacidos en las montañas que luego discurrirán por praderías de verdoso tapiz,  tras atravesar un multicolor mundo vegetal de alisos, abedules y chopos de los bosques de ribera. Hay ríos pequeños, medianos y más grandes, pero todos siguen la ruta del paisaje que nos emociona.

Al principio lo hacen saltando por encima de la geometría de la media ladera en busca de la calma de los cañones de geórgicas piedras; las de los cultivos en terraza. Y una vez superado ese vértigo, los ríos se serenan y prolongan su estética por la vibrante geografía donde encuentran el germen de la belleza.

Además, los ríos de Galicia crean vida a su paso y son fuentes de energía.  En ellos beben el lobo y el gato montés. Y el corzo y el jabalí y la nutria y la ardilla bonita.

Cuando seguimos el curso de los ríos se recompone el relato en algún lugar de las ribeiras mágicas, allá donde generan el más asombroso y único paisaje.

9 MIÑO - MEANDRO +

 Los Lagos

Especialmente hermosos son los paisajes que crean los lagos donde el agua de la vida se remansa para reflejar la flora de ribeira y   para contarnos el estado más puro de la Naturaleza. Nacieron lagos y lagunas para prolongar la magnificencia del territorio, pero, inevitablemente, en este país nuestro, son también el pozo sin fondo de la magia y la leyenda.

Nos enseñaron que el gran Miño nacía en Fontmiñá, pero su verdadero origen es un misterio, porque no hay aquí fuente si no laguna, espejo de la geometría de los árboles de la típica gándara gallega. Culpan a la bruja Irimia de tapar con piedras el lecho del río cuando nace, para ocultarlo.

La lagoa de Antela volvió a renacer tras años de seca dictadura y en democracia el agua vuelve a proporcionarnos las más llamativas degradaciones cromáticas.

De hidrografía indecisa, pero de perfecta y admirable belleza, es la Lagoa de Carregal, mitad marinera y mitad fluvial, en el mágico lugar donde la arena busca el cielo de Corrubedo.

En Cospeito la laguna es de posesión virginal, porque a Nosa Señora la creo para inundar una villa llamada Veria, en la que no había ni templo ni iglesia.

Una legendaria ciudad, que no una villa, permanece sumergida bajo las aguas de la Lagoa das Xarfas, al pié del Monte Louro, que es principio y fin de la Costa de la Muerte.

Y en Xuño, el agua dulce de su lagoa deja crecer nenúfares de verano para que en el entorno cercano al viejo castro, sea posible la vida feliz.

Los lagos y lagoas de Galicia son la gran fantasía del paisaje interior…

10  LAGOS +

 El Bosque

El bosque de tus sueños se pone el traje multicolor a partir de la primavera y hasta que cae la última hoja del calendario de otoño. En invierno se desnuda para que no le pese la nieve.

Por encima de un verdoso tapiz de maravillosas degradaciones, en el bosque de tu infancia la luz obtiene del entorno irrepetibles colores porque…

Amanece con bruma mansa que empapa la tierra. A través de ella penetra un sol tímido que matiza las perspectivas. Clarea más allá del mediodía entre conversaciones de pájaros. A veces, por la tarde, el verde se torna plomizo-gris de lluvia. Aunque luce más cuando aparece sobre el cielo el rojo gastado de un largo atardecer.

Todo está animado en este bosque, el mismo que inspiró a Wenceslao Fernández Florez y tal vez aquel que los celtas llamaron Lubre y convirtieron en sagrado. Crecen en él árboles de extrañas formas abrazados por líquenes misteriosos. Y a su lado, helechos de ascendencia milenaria, que esconden la casa del gnomo. ¡Y quién sabe si en él habitan aún las hadas! Este bosque es la fraga, bella y misteriosa, propia de la Tierra de la fantasía y la leyenda.

Hay en el país otros bosques de ladera, crecidos entre prados y cultivos, que llamamos soutos. Crece en ellos el castaño que da fruto en otoño y en primavera aún se presenta desnudo de hojas y de erizos.

El souto es primo hermano de la carballeira, que está próxima a lugares humanizados, e incluso llega a ser el centro de alguno de ellos: pulmón de villa en donde se celebra la feria y la fiesta.  Aunque también hallarás carballeiras hermosas que nacieron para la romería en el entorno alto de las románicas capillas.

Dicen que estos bosques  llegaron a cubrir todo el país, cuando el territorio era solo de nuestros ancestros, los pueblos galaicos.

11 BOSQUE ++

 Las Rías

Ahí tenéis como ejemplo las que yo llamo “leiras do mar”, arenales acotados para el cultivo de bivalvos; y también las bateas que en todas las ensenadas bellas contrastan con ese azul intenso que se enfrenta a todos los verdes de la costa. Las Rías de Galicia son el espejo donde la Tierra contempla su inconmensurable belleza, pero también son poseedoras de una extraordinaria riqueza: sus pescados y mariscos tienen un sabor realmente especial. Aunque esto del buen sabor tiene su explicación.  Por una parte está el alimento de las especies que crecen en estas aguas de rico plancton  y por la otra las artes de pesca utilizadas.

12 LEIRAS +

 Las Rías de Galicia son un ecosistema único en el mundo y sus condiciones  son irrepetibles en cualquiera otra parte del planeta. Por eso todos los gallegos queremos que el uso social y económico de los recursos continúe desarrollándose de forma armónica.

La pesca y el turismo, principales fuentes de su explotación, van de la mano. Todos somos conscientes  de que no se trata solo de estuarios, sino también de playas arenosas, cordones dunares, marismas y llanuras de marea que suman casi mil kilómetros de ambiente costero. Y como te contaba, bajo sus aguas habitan pescados y mariscos sabrosos, pero en sus márgenes encuentra refugio, también, otra importante fauna terrestre que puebla los espacios intermareales.

13 INTERMAREAL +

Las Rías de Galicia ofrecen la posibilidad de descubrir las claves ecológicas y geomorfológicas que operan en estos medios, claro; aunque, si te fijas, cada una de ellas te ofrece una postal de olas que van y vienen hacia el “barco de la vida” para pronunciar su música suave y cadenciosa, sinfonía de paz inmensa que suena mientras la luz de plata de las estrellas más brillantes penetra en el agua, procurando el tesoro que oculta…

Gracias a esa luz lo encuentran marineros artesanos desde la hora en la que el sol incendia la bóveda celeste del atardecer  hasta que las luces de la alborada confluyen a flor de agua.

14 PUERTO +

En las Rías de Galicia la pesca la practican verdaderos artesanos… herederos de los creadores de cada arte. Los más viejos tienen nobleza en el alma y arrugada la piel porque están curtidos en barcos de tan vieja arboladura como la antigua dorna… que fue primitiva embarcación de este mar: una barca xeitosa, capaz para capear el temporal. Pero, con esta crisis que cabalga por tierra entre la negra sombra, se ven ahora muchos más jóvenes que antes. Han vuelto al mar de sus abuelos…

Navega esta nueva generación marinera para seguir viviendo, que navegar les es indispensable.  Navega por esos lugares de la ría donde se oculta el bogavante, la centolla, la nécora, la vieira, el pulpo, la lubina, el rodaballo, el rape, la xouba…

15 MARISCO +

Los Mares

El Atlántico deposita su azul sobre los azules de la gran playa del surf y al Cantábrico le crecen agujas para interrumpir su playa bonita. El océano manda repetidas olas para besar con ternura la arena blanca y el mar repite cantos de ola sobre la roca grande. Océano y mar confluyen en medio de la belleza única bajo una misma bóveda, la del cielo gallego.

16 AGUILLÓNS +

Las Islas Cíes configuran el espacio natural más popular bañado por el océano. Son  piedra en su cara sur  y  blanca arena por el norte. Para gozarlas hay que caminar legendarios senderos, entre viejos pinos crecidos sobre un manto verde.

Aquí nos nacen aguamarinas en las manos mientras el viejo faro encara hacia un lado la inmensidad oceánica y hacia el otro la hermosura inconmensurable de la Bahía de Vigo…

17 CIES +

Este paisaje de absolutos silencios es una cadena de luz con sombras. Cuando el sol va hacia el poniente y deja sobre el mar su último rayo, es cuando se escucha la música de la naturaleza perfecta… El momento en que el Faro del Cabo Ortegal, majestuoso, ilumina Os Aguillóns con intermitentes luces que marcan la fusión de los dos mares.

Saltan las olas por encima de las rocas esculpidas y llenan todo el espacio que alcanzamos con los ojos. Es la bravura del mar. Principio de una costa que es roca y arena; agua azul y albor de espuma blanca.

También piedra esculpida por el batir del agua allá donde el Cantábrico brama arte.  He aquí la playa del delirio, el fulgurante lugar donde nacen las palabras de sal de los poetas.

18 CATEDRALES +

La Aldea

A poco que nos salgamos de la moderna autopista y busquemos una vieja carretera, en la primera curva  aparecerá una aldea. Incluso con luces de ciudad al fondo y próxima a los grandes almacenes.

Esta aldea tiene alma y la rodean ya campos cultivados con el mimo generoso de las gentes que la habitan. Poco o nada tiene que ver con aquella otra aldea que dejó el abuelo cuando se fue a América, en la ladera de verde hierba y rodeada por campos poco cultivados.

La nueva aldea es el rincón perfecto para reconstruir ahora los nuevos sueños, basados en la activa producción agropecuaria; la industrialización y la mecanización; en la transformación total y definitiva de un sector tradicionalmente necesitado.

En la nueva aldea hemos de construir el futuro que se avecina porque es el lugar de cuando éramos niños, aquel de las grandes alboradas y donde los agros, bien sembrados, darán los frutos apetecidos. Y los montes que la rodean, aún mas madera.

Volveremos a disfrutar de la aldea, sentados en el rincón mágico de la naturaleza más hermosa, junto al río que entona el canto rumoroso del agua, mientras los pájaros cantores entonan la banda sonora de cada tarde, a la que pone fin la campana de la iglesia, dos veces centenaria y románica.

19 ALDEA +

La Ciudad

Siete son los caminos xacobeos. Siete las ciudades gallegas y siete sus símbolos. Siete maneras de vivir y siete modos de divertirse. Siete son también las rutas urbanas del placer y siete las diferentes formas de conocerlas. Ahora imaginemos la historia entre las sombras que provocan las luces de la ciudad en contraste con los neones de la modernidad más alegre.

A Coruña la preside el Faro de Hércules, que es Patrimonio de la Humanidad. Cuando llega la noche, la ciudad y su mar se convierten en un nido de luciérnagas noctámbulas que se van de copas por este paseo,  la Marina y la calle Real.

20  CORUÑA-VIGO

Vigo es Puerta Atlántica y montaña de peces de amanecer en el Berbés de los pesqueros. Su ciclo más divertido se inicia cada noche y más aún cuando la semana cumple su final, en los locales del centro o en Samil, donde el espejo de su bahía nos cuenta la vida a la luz de los pequeños faros.

Las sombras de las grúas de los astilleros alcanzan Ferrol, cuando miles de bombillas urbanas llevan el arco iris hasta la ría que baña los viejos arsenales. La gente aquí pasea la noche por el centro procurando compañía amiga para compartir música nueva y las copas de siempre.

21 FERROL-PONTE

Pontevedra siente el latido de su corazón nocturno en la gran plaza, donde fluye la conversación de terraza frente al histórico convento franciscano, justo al lado de la fuente que da de beber a quien pasa, con la virgen Peregrina como testigo.

Las luces de Lugo destacan el monumental paso de dos milenios; la Muralla nos recuerda que la ciudad es Augusta… pero la noche nos cuenta que es una urbe abierta a la modernidad del siglo XXI, y que habitan sus locales, a estas horas,  gentes divertidas. El paseo nocturno, sin embargo y por frío, es solo para románticos.

22 LUGO-OUR +

Los puentes de Ourense recomponen su paisaje nocturno mirándose en los espejos del Miño, mientras la gente busca el agua termal a las orillas del gran río y la noche avanza hacia el casco viejo, donde está la magia de la luz que recompone la historia y el local de juventud donde se baila mirando hacia la Catedral.

Pero para Catedral, la de Santiago, espléndida en sí misma y por las plazas que la rodean; refugio de peregrinos que llegan de día y se van de aquí con la noche, tras admirar la hermosa selva florida de piedra de la fachada occidental del templo, una de las mayores obras de arte del mundo. Aunque también tientan al peregrino los humanos placeres que encuentra recorriendo las calles de piedra de la ciudad vieja, en los locales donde la noche es bohemia, larga y amiga.

23 SANTIAGO +

La Magia

La magia de Galicia está en sus meigas y meigallos, en sus druidas y merlines, pero… también es mágica por naturaleza.

Sí. La magia está aquí.  En la Tierra y en el cuadro arcoiris, policromático, generador del paisaje que provoca la más sublime admiración. En el entorno natural donde suceden todos los milagros y se cumplen todos los sueños.

Procura, entonces,  los mágicos círculos donde los pueblos galaicos desarrollaron su vida. Asciende a los montes sagrados donde quedan restos del templo en el que los romanos hallaron el Ara Solis. Acompaña al peregrino por la senda xacobea, de románico en románico. Descansa el Camino en el viejo monasterio donde aún cantan viejos monjes sabios. Sube a la atalaya magnífica de la fortaleza fantástica, que alza su torre del homenaje por encima de la cumbre y de la villa.

Verás. Desde el castro y desde el monte sagrado se contemplan nuestros dos mares, que nos trajeron varios cristos crucificados, alguna virgen y el cuerpo del Apóstol. Por el Camino nos salen al paso soutos con frutos de castaños, para que las meigas preparen sus brebajes. El monasterio se mira en el espejo del gran río, aunque hay otros cenobios que emergen desde el bosque encantado, donde está la casa del gnomo… Detrás de nuestra historia y como telón de fondo, hallaremos un paisaje diferente. Ahí está lo verdaderamente mágico.

24 QUEIMADA