galiciaunica Un recorrido semanal por Galicia, España.

NOS ROBARON UNA HORA DE VIDA CON LUZ

LA LUZ DEL ADIOS + copia

Otra vez.  Otro otoño más que me roban. A mí y a Peggy, que es la mascota del Dr. Frame. También a las gallinas de Vitoria, a las ovejas de Manuel, a los caballos de Guillermo  y a todos los animales y personas que habitamos en el Val da Mahía. ¿Qué digo?  ¡A todos los que vivimos en Galicia!

No fueron los “romanos”, como les llama mi amiga Carmen. Ni los del Casteiriño. Ni la banda del Clan de Carballo. No, esos solo roban a los ricos que ellos también son pobres, aunque no de solemnidad. Fueron…

—– ¿Quiénes, quienes? Porque eso más bien parece obra de una organización criminal…

Nos robaron los que protegen a los políticos corruptos, a las bandas organizadas de empresarios con malas prácticas, a los de las tarjetas black, a los tesoreros que guardan el dinero en Suiza, a los “pujoles” y demás familias…  

—– ¡Pues lo tenéis jodido!

Nos robaron, un otoño más, aquellos que protegen a las Eléctricas, esas veleidosas señoras que mal iluminan tus noches a cambio de un recibo mensual de los que te hacen temblar, como si la energía no fuese un bien al que tenemos derecho a cambio de un precio justo,  todos los ciudadanos aquí nacidos; en esta Tierra donde embalsaron el agua de nuestros principales ríos y sembraron nuestros montes de molinos de viento.

—– Ya… ¿Y qué os robaron?

A Peggy una hora de jardín, a las gallinas su alegre canto matinal tras haber puesto un huevo, a las ovejas la dulce hierba del atardecer, a los caballos  sesenta minutos más de esa libertad tan importante para quien vive al aire libre y a los humanos seres…

—– ¿Qué os robaron?

Nos robaron una hora de luz de nuestras vidas que es tanto como decir una hora de vida con luz.

—– No entiendo…

A mí me han robado una hora de paseo por la aldea, conversando con la sabia gente con la que convivo, que es la que te aclara, por si tú no te habías enterado…

—– Son as sete e xa é de noite. Dentro de nada, as seis a ver que facemos, porque a lus non é nada barata…  

Y aquí, en esta Galicia de aldeas de jubilados, nos seguimos levantando y acostando  a la misma hora con lo que la mañana no nos afecta, pero la tarde nos sube ese recibito mensual de la Eléctrica en cuestión, un diez por ciento de media…

—– Por eso en Portugal no cambian la hora. Ni en Canarias.

Claro, como debería ocurrir en Galicia que somos Costa Oeste y bien diferentes de los del Este, aunque no celebremos ningún referéndum… Solo pedimos que las emisoras de radio te den la hora así…

—– Son las siete de la tarde, menos en Galicia y Canarias que son las seis.

—– ¡Coño! ¡Tampoco quedaría tan mal!

Y a los gallegos, nos ahorraría muchos euritos cada invierno…

—– ¿Y de quien depende?

Pues de un gallego… llamado Mariano Rajoy que dicen que preside el gobierno de España.

—– Pues podría…

Es que solo viene en verano y entonces no tenemos problemas con la hora oficial.

—– Tranquilo, amigo, que algún día “PODREMOS”.

(Esta última frase es del nuevo tabernero, el que asiste a los peregrinos a pié de pista incluso gratis, si hace falta).