galiciaunica Un recorrido semanal por Galicia, España.

POR TODOS LOS CAMINOS (VII)

1 CAMINO INGLÉS +

LA LUZ 

“Lo que algunos quieren llamar y decir es que había aquí un gran espejo donde se aparecían las naves que en alta mar y más lejos navegaban; y que por engaño, los ingleses lo hurtaron para tomar la  Ciudad. 

Pero este es cuento viejo. Porque lo que había en la  Torre, era una luz o lumbre que se hacía para guiar al puerto a las naos que de noche venían. Le llamaban la Torre del Faro, por el farol o señal que tenía. Y esta Torre, de tan grande altura y antigüedad, junto a la ciudad a la orilla del mar…  ¡Es cosa maravillosa…!”.

(Bartolomé SAGRARIO DE MOLINA (1549)

2 TORRE DEL FARO +

VIENEN POR MAR

Cuentan los antiguos cronistas del mar que a todos los puertos gallegos llegaban peregrinos, nacidos con vocación marinera, camino de Compostela. Desde Ribadeo a Padrón,  por el mar de las rocas de aguja o por las plácidas rías, arribaron siempre barcos “xacobeos” procedentes de Escandinavia, de Bretaña o de Inglaterra.

Los primeros documentos, en el reinado de Alfonso VII, hablan de las peregrinaciones por vía marítima situando el principal lugar de arribada en el Burgo de Faro, al fondo de la Ría de Coruña. Y dicen que, a partir del año  1.209, con la fundación de A Coruña como Villa,  los accesos a Santiago por mar se perfilan principalmente por su nuevo puerto internacional. Hasta él  llegan desde entonces naves de peregrinos procedentes de todo el Golfo de Vizcaya, del Canal de la Mancha y de los mares del Norte y Báltico.

3 MARES DEL NORTE +

Nace así el llamado Camino Inglés, que es la Ruta que siguen, además,  bretones, flamencos, escandinavos y los peregrinos procedentes de los pueblos europeos atlánticos. El actual Camino Inglés sigue el trazado de la ruta medieval más transitada entre Santiago y Coruña, que se conocía como Camino Real.

A CORUÑA

La luz crea la belleza esencial  del paisaje marino. Espejos de oro y estrellas de plata dibujan los horizontes de una ciudad rodeada de mar. La luz es lo que proyecta sobre las olas la pasión de sus habitantes.

El mar es Atlántico. Playa céntrica de salitre y aguas sanas, bien yodadas. Puerto. Faro de leyendas y también legendarias cuevas marinas donde habitan las sirenas. Recibe la luz de cristal de sus galerías en la hora de la calma, que es tiempo de paseo contemplando cómo se mece la tarde sobre el océano.

Al final, la ciudad permite que las serpientes de colores conquisten el espacio. Entonces, se escucha el latido nocturno. Brilla la magia urbana en forma de bombilla. Se iluminan los nuevos símbolos… y  A Coruña se torna cervecera, apasionada, y divertida.

4 A CORUÑA +

 O FERROL

Su nombre es marinero: Ferrol viene de Faro o Farol, aquella luz que guiaba a los barcos y que es símbolo que aún aparece en su actual escudo. Es marino por ascendencia y porque cuanto tiene se lo da el mar. Su origen está en uno de los pocos castros marítimos de Galicia que los historiadores fijan en el Ferrol Vello, la ciudad que mantiene el encanto de un barrio centenario, el muelle de Curuxeiras; desde aquí creció hasta convertirse en ciudad.

5 FERROL +

 Si te subes al más antiguo faro bien se ve que estamos en el centro del poder naval creado bajo el reinado de Fernando VI, cuando florecieron  los fuertes, los cuarteles y los más afamados astilleros del mundo. A un lado está el mar bravo, el Atlántico que navegaron los Ártabros, con playas interminables y también paraísos escondidos. Al otro, la ría inexpugnable con sus fortalezas y la silueta de esos castillos de hierro que nos anuncian los mejores astilleros del mundo. Esta es una ciudad hermosa que aún llaman Departamental, porque siempre estuvo alerta para la guerra… aunque siempre vivió en paz.

EL CAMINO INGLÉS

6 Mapa Camino Ingles

 Durante el reinado de Alfonso VII es cuando los cronistas fijan las primeras arribadas de peregrinos por mar; de manera principal llegaban las naves al Burgo del Faro en A Coruña y al desaparecido castro marítimo de Curuxeiras en Ferrol. Pero eso no quiere decir que a los otros puertos gallegos del norte no arribasen también peregrinaciones náuticas.

A partir de 1.209, cuando crecen como  Villas las poblaciones de A Coruña y Ferrol, las peregrinaciones marítimas tienen otras comodidades de atraque en sus nuevos diques, que ya se perfilan como futuros puertos internacionales. Es el momento de su mayor apogeo y a los dos puertos gallegos llegan naves con grupos de cien peregrinos, bastante más numerosos que los que se registraban por los caminos terrestres.    

La peregrinación en sí comenzaba en sus países de origen, y cuando llegaban a puerto las naves, los peregrinos descansaban uno o más días de una travesía breve pero dura, y aprovechaban para asistir a diversos actos religiosos que se desarrollaban en las iglesias coruñesas o ferrolanas, oficiados muchas veces por los clérigos-peregrinos que venían de su País.

7 IGLESIAS SANTA MARIA Y SAN FRANCISCO

A Coruña es una ciudad encantadora y moderna, llena de arte, museos, y edificios históricos que contrastan con nuevas y grandes avenidas, paseos marítimos y espacios para el ocio…

Decía Blasco Ibáñez que es una ciudad-barco, porque es el mar quien la rodea. Por eso sigue siendo uno de los más importantes puntos turísticos de Galicia…

El Camino Inglés parte de la Iglesia de Santiago y bordea la costa hasta  Culleredo, municipio al que está unida. El trayecto hasta  Bruma, punto de encuentro de peregrinos del Camino Inglés, atraviesa los municipios de Cambre y de Carral, en medio de un paisaje interior de lo más bello.

8 CORUÑA BRUMA

Desde el puerto de Ferrol, recorreremos tan solo 118 kilómetros para llegar a Santiago. Esta Ruta Xacobea, la mÁs concurrida por nobles y eclesiásticos durante la Edad Media, sigue el trayecto costero por Pontedeume y Miño hasta llegar a Betanzos. Y desde la antigua capital del Reino de Galicia, se une en Bruma a la ruta que proviene de A Coruña, para seguir por Ordes hasta Oroso y desde allí alcanzar la meta final del Camino en la Compostela Universal.

El Camino deja atrás Ferrol  por los barrios de Recemil y Caranza, y toma la Avenida del Mar, paralela a la Ría, para llegar a Neda y de allí a Fene.

9   ADIOS, FERROL

Saliendo de Fene, el Camino Inglés enlaza con el Camino Real para internarse en Cabanas. Deberá desviarse el caminante si quiere admirar la iglesia de San Martiño do Porto, de bella portada barroca. En Cabanas, también podrá descansar en la hermosa playa de A Madalena, en pleno estuario del Eume. Luego, por el Paseo Marítimo, cruzará el histórico puente y llegara a Pontedeume, villa monumental que merece ser visitada detenidamente. Incluso subir hasta el monte Breamo para admirar las más bellas vistas de las Rías Altas y conocer la Iglesia de San Miguel, románica, del siglo XII.

Desde Pontedeume el Camino lleva a Buiña y desde allí toma dirección a Perbes, pasando por Viadeiro y Bañobre. Entra en Miño tras cruzar el río Baxoi por un puente medieval de un único arco y sigue por el Camino Real hasta la Plaza del Mercado. El albergue de peregrinos está proximo al mar.

Merecerá la pena descansar en Miño y si es verano disfrutar de sus magníficas playas, entre las que destaca la Playa Grande.

10 HASTA PONTEDEUME

El caminante abandona Miño por el Camino Real hasta la estación del ferrocarril. Cruza la vía y vuelve a la orilla del mar. Este tramo es uno de los más bellos del Camino Inglés.

Atraviesa la conocida como Ponte do Porco –por el símbolo de los Andrade- y nos descubre el espacio natural que configura el estuario del Lambre. Tras él, se mete el monte hasta llegar al Pazo de Montecelo y a la iglesia de San Pantaleón das Viñas, también románica.

11 MIÑO-BETANZOS

Pasará el peregrino por Matacabalos, Chantada, Guende y Souto, una zona con hermosas vistas sobre la ría de Betanzos y sus marismas. Sigue luego el Camino por Gas, aldea con fuente y cruceiro, hasta la iglesia de San Martiño de Tiobre, lugar en donde también está el santuario de Nosa Señora do Camiño.

El Caminante cruza el río Mandeo por la Ponte Vella y entra en Betanzos, antigua capital del Reino de Galicia, llena de interés histórico-monumental.

12 BETANZOS

Abandona el Camino Betanzos por los lugares de Coto, Campoeiro y Xan Rozo, para entrar en el municipio de Abegondo… En este territorio coruñés pasamos por Limiñón, cruzamos un hermoso puente y llegamos a la aldea de Cima de Vila, cerca de la iglesia de Santiago de Meangos. Continúa por Presedo, Leiro, Loureiros, Francos, Matiño y Boucello hasta la ermita de Vilacoba.

Desde Monte, se interna entre hermosas fragas hasta Fontenla y A Malata. Y tras un paisaje agrícola y ganadero –ya en el municipio de Ordes- llegamos a Bruma, lugar en donde se une el Camino Inglés procedente de A Coruña. Aquí existen restos del antiguo Hospital de Peregrinos y hay un albergue de nueva construcción.

Por Seixo, Cabeza do Lobo, Ardemil, Carreira, Mámoas, Carballeira, A Rúa, Trabe, O Cubo, Outeiro de Abaixo y Outeiro de Arriba atraviesa el Caminante el municipio de Ordes.

Y siguiendo el trayecto del Tambre llegamos a Oroso. Estamos ya en el umbral de Compostela.

13  DESDE BRUMA copia

DOS MARES

Dos mares bañan la Tierra de Santiago y a lo largo de su costa, miles de hombres se criaron acunados por el sonido del ir y venir de sus mareas,  atlánticas o cantábricas.

El mar es en Galicia patria de mariñeiros,  protagonistas del esfuerzo común que supone navegar a diario en busca de la vida. Y es quien dibuja el paisaje de acantilados hermosos y playas interminables, atractivo infinito de veranos cálidos.

Por mar llegaron y llegan aún peregrinos en veleros de sueños.Y es el mar quien pone límites al imaginario fin del mundo, que sigue buscando el caminante desde Compostela.

14 MAR DEL NORTE

Dice el poeta que en el Mar de Galicia tiene el sol su casa de cristal, para dormir cada día, cuando los peregrinos descansan su fatiga.La semana que viene buscaremos contigo el refugio del último rayo en el Finis Terrae. 

15   CONCHAS VIEIRA FINAL