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SEMANA SANTA EN AS ERMITAS

AS ERMIDAS GENERAL

Por Raquel SERTAJE

Se acerca una de las fiestas religiosas más destacadas del calendario español. Diversas localidades a lo largo y ancho de la península abren sus puertas para recibir a masas de fieles y curiosos que no quieren perderse esta celebración de fama internacional.

La Semana Santa Gallega tiene una oferta gastronómica y cultural única para todos aquellos deseosos de vivir esta tradición religiosa a flor de piel. En la comarca de O Bolo, en un enclave espectacular, encontramos el Monasterio de As Ermitas, una oferta alternativa para una Semana Santa diferente.

CONTEXTO HISTÓRICO

Cuenta la leyenda que en el siglo XIII los pastores que frecuentaban la zona de las Sierras de Queixa, do Eixo y San Mamede se percataron de que, en un punto específico de la montaña que se erigía sobre el Bibei, el ganado comenzaba a bramar sin explicación aparente. Curiosos, se adentraron en la cueva y descubrieron una imagen de la Virgen con el niño en brazos escondida entre zarzas y matorrales.

Sin embargo, se cree que el origen de la imagen data del siglo VII. Unos 600 años antes de que fuera descubierta por los pastores en la cueva de la montaña, alguien depositó allí la escultura de la virgen, donde permaneció escondida por más de cinco siglos. Las hipótesis apuntan a que quien lo hizo fue probablemente el autor de la escultura que, intentando protegerla de las incursiones musulmanas -numerosas en aquella época- la dejó allí hasta que fue descubierta siglos más tarde por los pastores del lugar.

Las gentes de aquella época no tardaron mucho en atribuirle a la imagen poderes curativos, llegando su fama “milagreira” hasta nuestros días. En el S. XVII el Obispo de Astorga, Alonso Mejía de Tovar, cayó gravemente enfermo cuando se encontraba de visita pastoral por la zona. En el que pensaba era su lecho de muerte, dijo haber tenido una visión en la que se le aparecía la Virgen y posaba su mano sobre su frente, curándolo milagrosamente. Cuando sanó y vio la imagen de la virgen de las Ermitas, dijo reconocer en ella a la que se le había aparecido en sus visiones y fue entonces cuando decidió construir el monasterio en señal de gratitud.

Sin embargo sería su sucesor, el monje Jerónimo Fray Nicolás de Madrid, conocido por haber dirigido las obras del Panteón de los Reyes del Escorial, el auténtico realizador de esta obra y quien convertiría As Ermitas en un importante santuario. A pesar de que Fray Nicolás fue nombrado Obispo de Astorga en 1660, dirigió las obras del monasterio personalmente siempre que sus obligaciones se lo permitían. Fue en esta etapa cuando se construyeron los edificios anejos al Santuario: la capilla mayor, la cúpula, el crucero y el retablo. En 1665 Fray Lorenzo fue trasladado al obispado de Osma. Antes de partir quiso despedirse de As Ermitas, y la muerte lo sorprendió cuando rezaba ante su altar, como se dice que le había pedido a Nuestra Señora. Fue enterrado en la capilla del altar mayor.

EN EL CORAZÓN DE OURENSE

El Monasterio de As Ermitas puede presumir de tener una fachada que es considerada una de las grandes obras del barroco gallego. Junto al de Muxía, este antiguo monasterio es uno de los primeros santuarios marianos de Galicia – recinto o lugar cristiano dedicado exclusivamente a la Virgen María-.

La imagen de la Virgen puede datarse en los s. Xlll o XlV. La imagen medieval está rodeada de un arco argénteo de llamas, estrellas y ángeles conseguido en la Real Platería de Martínez, de Madrid, en 1845; uno de los ángeles lleva una inscripción en la que se confiesa esclavo de María, pues, reza así: "Totus Tuus”.

La imagen de la Virgen puede datarse en los s. Xlll o XlV. La imagen medieval está rodeada de un arco argénteo de llamas, estrellas y ángeles conseguido en la Real Platería de Martínez, de Madrid, en 1845; uno de los ángeles lleva una inscripción en la que se confiesa esclavo de María, pues, reza así: «Totus Tuus”.

Históricamente, la devoción a la Virgen de As Ermitas en toda la provincia de Ourense fue cultivada por santeros y ermitaños, quienes la extendieron por León, Zamora, Portugal, llegando incluso su culto a las Américas, en donde se dice que emigrados gallegos erigieron una capilla a esta Virgen en tierras mejicanas.

De la Iglesia de As Ermitas, construida en el s. XVIII, podemos destacar:

  • Los motivos decorativos del cuerpo central.
  • Los escudos de los Obispos de Astorga.
  • Las figuras de las Virtudes.
  • El precioso crucero del portugués Manoel Miranda.
  • El impresionante Vía Crucis barroco. Compuesto de 14 capillas que representan los pasos del Calvario, este vía crucis tiene más de 60 imágenes de talle natural (s. XVIII) y se expande a lo largo de 1km. Junto al del Bom Jesús de Braga (Portugal) y al de San Carlos Boromeo (Italia), es el único monumento de este estilo conservado en toda Europa.

TURISMO RELIGIOSO

Durante Semana Santa, el Monasterio de As Ermitas también abre sus puertas al turismo religioso.

Como en otros lugares, la Semana comienza con el tradicional Domingo de Ramos que representa la entrada  triunfal de Jesús en Jerusalén, y termina el Domingo de Pascua, cuando se celebra la Resurrección. La lista de todos los eventos que tendrán lugar en As Ermitas se puede encontrar en su página de Facebook.

Pero además de actividades y eventos religiosos, la comarca tiene mucho más que ofrecer…

EL ENCLAVE

AS ERMIDAS  Y BIBEI

A medio camino de las villas ourensanas de A Rúa y A Gudiña (carretera C-533), el viajero que baje la vista el el Outar de Pregos (Mirador de Plegarias) no podrá por menos de quedar extasiado ante la belleza del paisaje que se brinda ante sus ojos: Una magnífica garganta atravesada por el río Bibei en cuyo punto más profundo, encrestado en la piedra de la montaña, descansa el Santuario de As Ermitas.

Salpicado de viñedos, centenarios castaños y olivos, e inundado por el incesante murmullo del Bibei, el impresionante santuario parece reposar en el conjunto de este mágico enclave. Se cree que el topónimo de As Ermitas deriva de ser este el lugar escogido por monjes medievales como punto emblemático de la vida eremítica de la Tabaida Galaica. Aunque hoy turistas y lugareños pueden gozar de una pequeña y acogedora playa fluvial, As Ermitas sigue siendo un enclave perfecto para la oración y meditación. Eso también significa que es prácticamente imposible tener cobertura en el punto más bajo del valle