galiciaunica Un recorrido semanal por Galicia, España.

XOSÉ RAMÓN IGLESIAS VEIGA

EN LOS SÓTANOS DE LA SABIDURÍA

Xose Manuel Iglesias Veiga

          Cuantos gallegos de la diáspora en Latinoamérica envidiarán sanamente mi  circunstancia: he sido uno de los primeros lectores privilegiados de un libro excepcional, largamente aplaudido en Vigo y que supongo saltará el Atlántico, porque lo merece. Me refiero a “Arquitectura e indianos na cidade de Vigo e bisbarra” (Instituto de Estudios Vigueses, mayo de 2013), de Xosé Ramón Iglesias Veiga, que solo cabe pensar que por error figura en la cubierta el castellanizado José que no ha utilizado nunca en su larga obra.  

          Desfilan por el libro nombres de emigrantes gallegos, desde Sanjurjo Badia y García Barbón  a Octavio Ramilo Portela, que se hicieron grandes en diversos países de USA para el sur y volvieron a esta tierra desde la que escribo, para hacer ostentación de sus fortunas o para devolver a Galicia lo que antes no les habían dado, pero que en cualquier caso dejaron una arquitectura diversa y casi siempre de interés, estudiada con todo rigor en el libro de Moncho. Doy por hecho que aquel hispanoamericano que  desee adquirir el libro conocerá la forma de hacerlo si se dirige a info@ievigueses.com.

Arquitectura indiana en Vigo.

          Moncho Iglesias, para los íntimos, entre los que me encuentro hace varias décadas, cuando los dos nos dejábamos los ojos en las colecciones microfilmadas de Faro de Vigo, decano de los periódicos españoles y desayuno, comida y cena de la inmensa mayoría de los vigueses que leen prensa, así como muchos de la provincia de Pontevedra, su campo de acción más preciado, y aun de las otras tres gallegas. Poco después de aquellos tiempos y antes de que la Diputación de Pontevedra publicara su “Antonio Palacios, arquitecto. De O Porriño a Galicia” (1993), herí  la humildad de Iglesias una y otra vez  vaticinándole que más pronto que tarde sería reconocido como el mejor especialista del mundo en el técnico porriñés.

        Moncho Iglesias, que  da clases en el instituto porriñés de O Pino Manso y es doctor en Historia, hace mucho tiempo que es reclamado para escribir libros o trabajar en los sótanos de la sabiduría donde se preparan reconocimientos a Palacios, como grandes exposiciones por ejemplo, porque yo en aquella predicción no me he equivocado.

Asesinato del Patrimonio Histórico

         Iglesias Veiga ha publicado innumerables libros, unos cuantos mano a mano con otro de los grandes en el estudio de la arquitectura gallega Jaime Garrido; este anda contento porque al final el Concello de Vigo ha resuelto tirar abajo el castillo-pastiche que destroza el Castro, algo que reclama el buen Jaime desde hace mucho tiempo. Garrido merece mucho más de lo que ha recibido del Vigo a cuyo estudio ha dedicado seis vidas de las siete de gato que le deseamos  y es que la verdad por bastante menos otros tienen calle a su nombre, medalla de la ciudad o son vigueses distinguidos. Esto último lo soy yo desde el 99 y alzo la mano el primero para decir que Jaime debió estar antes que el firmante –dicho sin la menor falsa modestia- en ese púlpito o estadio y confío en que a Xosé Ramón Iglesias Veiga no tarden de colmarle de dignidades tanto en Vigo como en Porriño –sus estudios sobre la cantería son importantes-, no sea que a los gallegos del sur en general llegue a darnos vergüenza de la injusticia de algunos de nuestros políticos a la hora de repartir distinciones.

 Gerardo GONZÁLEZ MARTÍN