CUANDO RENACE EL DÍA
La aurora nace… porque el sol renace.
Viene para cantarnos la poética de la luz mágica que genera la gran metamorfosis de la noche y el día. Por eso en Galicia le decimos alborada.
Por el espléndido albor que genera la belleza, cuando el nuevo sol se posa sobre la sierra y el río… la alborada es la perfección que desafía el orden y nos permite retornar al génesis diurno.
De esta pasión por la belleza viene la música de Veiga.
La alborada musical es una dulce melodía de métrica binaria, que suena al amanecer como un canto amoroso a la patria renacida… Es como la danza ritual del nuevo día, que bailan tierra y mar.
Con esta alborada llega también el instante poético del bardo sobre el lomo del paisaje. Vuelven los sueños y se quejan los pinos. Nace un himno.
Nace allí donde crecen las ansias por saber el íntimo secreto final, que solo conocen las imaginadas sirenas de agua…
Ellas sí saben dónde está la casa de cristal en la que se acuesta el sol de cada tarde… para procrear con ellas, cada noche… una nueva alborada.
Joe Brunenger con su acordeón interpreta la “Alborada de Veiga”, todo un himno del folklore gallego.