EDICIÓN 610
BON NADAL
En Galicia la Navidad sabe a marisco y a capón de Vilalba. Tiene sonido de gaita de fiesta y su paisaje verde viste de blanco rocío el amanecer del valle y de nieve blanca los tejados de pizarra.
Es el encanto de las meigas, la puerta abierta del edén, el camino de las estrellas, la gente que cree en milagros, las campanas de Bastavales, las panxoliñas, la catedral, la luz del faro… ¡También el Yule celta y el Tizón de Nadal…!
Y el regreso a casa de los corazones errantes o la inevitable ausencia de los que están lejos, la única canción amarga de una nochebuena y de un feliz mediodía…
Desde Galicia, ¡Bón Nadal…!
EL FRÍO SANA
Llevaba demasiados días en casa para no apreciar este sol que me devuelve la vida que se me lleva la tormenta, por eso empuñé esta mañana el bastón para dar una vuelta alrededor de la manzana. La gente crítica el frío, pero a mí me sana; y seguramente a los colegas de la venerable ancianidad social… también. Espabilo, pienso en que aún existo y me animo a conversar con la gente que pasa, que esta mi City es más cosmopolita aún que Compostela y a mi me gusta esa mezcla a la cubana, donde el color de la piel no importa, sobre todo en los niños en los que se apoya nuestro futuro.
— ¡Feliz Navidad!
— ¡Y próspero Año Nuevo!
Se me habían olvidado estas fechas en las que todos pedimos paz en el mundo, que se borre la pobreza de la faz del planeta y que este nuestro, La Tierra, recupere el esplendor de mi juventud cuando nadie hablaba del cambio climático.
— ¡Eso va a ser imposible!
No, no lo creas. Está creciendo la militancia ecologista en todas partes y las conciencias despiertan de su letargo para recriminar a la gente sus conductas.
LA CESTA ILEGAL
Esto, a pesar de la política, que se aferra a normas mal dictadas para justificar lo injustificable. Que no hay más que ver lo que pasa en esta Galicia nuestra: la Xunta declaró ilegales los sorteos de las cestas de navidad que tradicionalmente hacían bares, modestos establecimientos del pequeño comercio, los niños del Instituto y hasta el asilo de ancianos.
Quiero recordarle a este presidente nuestro que estos sorteos forman parte de nuestras fiestas y no son más que una ínfima parte de lo que el propio Estado nos incita a gastar en sus Loterías. Por demás, ese premio es sabroso y no despierta la avaricia. Yo no he comprado ningún décimo esta vez, pero espero que me toque la cesta, aunque la tilden de ilegal. Porque…
LA NAVIDAD SE PAGA CARA
La Navidad está aquí y eso se nota no solo en las lucecitas y adornos, sino también en el desmadre de precios que estamos sufriendo. En esto no influye el tiempo, sino el atraco anual de los supermercados y detallistas. Utilizan como arma ciertos productos de esos que llamamos tradicionales.
Olvídate del marisco: centolla, 35 euros kilo. Nécora, 32. Camarones, 100. Percebes, 170… ¿Sigo? Ni se te ocurra pensar en angulas: 1.200 euros a pie de río. El peixe fresco, de las rías y proximidades no baja de 27 euros kilo en Lonja.
Así que organizaros una cenita como hacía mi abuela, en base a un buen jamoncito, pollo de corral y postres variados “feitos na casa”. Y para el día veinticinco, nada mejor que un buen cocido. ¿A que sí?
SI BEBES NO CONDUZCAS Y SI TE DROGAS MENOS
Estamos en plena campaña de la DGT contra el alcohol y las drogas, por eso la Guardia Civil ha intensificado los controles en Galicia, que ya se sabe que por aquí somos festeiros y nos gustan la cerveza y el morapio, aunque no sea del buenísimo.
Lo malo no es el vino ¿sabes? si no las drogas. El dato, a mí al menos, me sorprende y me preocupa: dice Tráfico que tres de cada diez conductores dan positivo en drogas y esto no parece que sea propio del comportamiento de una sociedad como la gallega…
En fin, cuidaros mucho estos días y que vuestros cuerpos aguanten tanta enchenta.
IGUAL QUE AYER
Todos habéis vuelto esta vez para ayudarme a recordar aquel ocho de diciembre del mil novecientos sesenta y siete, en el Marín más marinero.
Algunos habéis venido desde el Espacio, a medianoche. Muchos desde Ourense y Pontevedra. Otros desde Madrid e incluso desde más lejos.
Estamos todos, ahora, frente a esa marina que preside Tambo: azul de salitre, verde de algas, hierro de barco, ocre de playa… También esta vez los colores de otoño se posan en el agua, como las gaviotas.
Igual que ayer.
Te digo. Gloria ha dejado de ser mi novia después de cuatro años y yo me siento feliz. Los abuelos de mis hijos por venir sonríen y apoyan la unión definitiva e incluso sagrada, que nos llevará mucho más allá de este pequeño mundo, posado sobre un mar de plata, de esos que huelen siempre a algas marinas y suena a música de olas en cada imperfecto rincón de su libre espacio.
Desde este día y desde este lugar donde se nos ofrece la más hermosa de las bahías bonitas, llegaremos juntos a los edenes de nuestras vidas navegando sobre la paz elemental del amor que nunca se acaba.
Esta historia sucedió un día ocho de diciembre de hace cincuenta y siete años. He querido contártela para que compartas la felicidad de dos enamorados a los que el trayecto final aún mantiene unidos, porque las canas y las arrugas engrandecen los corazones.
SOBREDIMENSIÓN
La primera vez que me asomé a esa ventana por la que el mundo quiere ver su mundo fue para presentar una actuación del entonces cantautor Bibiano Morón, que era un buen comunista, miembro de los Ceibes y amigo personal de un servidor. Fue en el programa “Aplauso” de Hugo Stuven, que presentaba Uribarri, la revista musical de los setenta-ochenta. Aquello me sirvió para asombrarme de aquel Prado del Rey en cuya cafetería podías ver a un franciscano ligando con una monja, lo que no dejaba de ser curioso.
Entonces TVE era la mejor y la única televisión de España y en aquellos estudios lo mismo se grababa la vida de Santa Teresa que “Noches del Sábado” con las primeras bailarinas de Giorgio Aresu, ya ligeritas de ropa, animándote a la juerga.
Fue ese el día que vi de cerca al que para mí era uno de los mejores presentadores de noticias de la época. Un tío guapísimo para mi hermana y excelente contador de la actualidad para mi sabio padre. Me refiero a Lalo Azcona.
Un buen día, sin embargo, desapareció de pantalla y nunca más supe de él hasta hace poco, cuando me enteré de que había dejado la televisión tiempo ha para dedicarse a los negocios. Le debió de ir muy bien a Azcona en el mundo de la empresa, porque llegó a presidir Tecnocom a la que Indra lanzó una OPA que hizo un poco más ricos a los accionistas de la tecnológica.
Lalo Azcona, aquel buen periodista tan guapo, dejó de ser presidente, pero se llevó a cambio 57 millones de euros, que esa sí que es una buena jubilación y no la mía, que no llega ni a ser cutre. Claro que yo cumplí con mi vocación, eso sí. Es decir, he llegado a pobre vocacional como tantos y tantos periodistas de este país que asisten, perplejos, al espectáculo de la política actual.
Solo un apunte sobre lo que está pasando. Yo diría que la España de las Autonomías está sobredimensionada. Es decir, no corresponde a sus necesidades el número de instituciones que la gobierna ni la nómina de políticos profesionales que las dirigen. Ese sí es un grave problema de Estado, por mucho que se empeñen algunos en echarle la culpa al batiburrillo de siglas de partidos que juegan esta democrática liga. Como diría Joan Tardá con la monarquía parlamentaria todo es una exageración…
ROBAN A MIS CAMIONEROS
La carretera es dura y el oficio de camionero cansa. Tengo varios amigos que se dedican a este trabajo y si pudieran, mañana mismo lo cambiarían.
—- Pero en estos tiempos hay que agarrarse a lo que hay…
La mayoría son autónomos porque no les queda otro remedio y por si fueran pocos los problemas derivados de una situación de crisis ahora les roban el gasoil y si pueden, la mercancía.
Es una moda que llegó a Galicia procedente de las grandes ciudades; de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla… Ocurre principalmente en áreas del extrarradio de Vigo, Lugo y A Coruña, donde se ven abocados a aparcar los camiones que antes lo hacían en los puertos, en las estaciones del ferrocarril o en la Zona Franca. Pero ahora esos organismos no disponen de espacios para aparcamiento y los camioneros tienen que buscarse la vida en las afueras de las ciudades.
Estos robos se realizan en toda Europa y la gente señala a bandas procedentes de países del Este. Es decir, tras los robos a camioneros se esconde una mafia perfectamente organizada, muy peligrosa y que mantiene asustados a estos profesionales que incluso, por miedo, duermen en los hoteles en vez de hacerlo en las camas de que disponen sus vehículos.
Lo curioso del caso es que, con el gasoil robado, los ladrones ofrecen los mismos servicios que los camioneros gallegos, pero a precios por debajo de los costes que genera la actividad y sin pagar impuestos.
Por eso está tan cabreada esta gente. Que no hay derecho a que nadie la proteja…
—– La Guardia Civil parece que solo está para multar…
La Xunta les ha prometido crear aparcamientos públicos vigilados en las zonas afectadas. Pero yo les diría a esas empresas que alquilan esos camioncitos ilegales para sus servicios, que piensen que pasado mañana les robarán a ellos: se quedarán sin sus mercancías por contratar ilegales y tratar de ahorrar dos duros.
—– La avaricia rompe el saco…
LA HORTERADA
Ahí lo tienes, al chucho con abrigo, un pobre can que pertenece a un hogar donde la estupidez consumista es la tónica general. Sus dueños han ido al especialista y les dijo que “hay que sacarles a pasear con ropa de abrigo”. Y allá se fueron a la boutique canina, de la que es dueño el mismo especialista, para comprarle lo último en abriguitos.
He visto esta mañana a uno de esos pobres perros que, en vez de correr libres por los agros, los llevan sus dueños con correa para que la gente vea bien sus modelitos. A uno de ellos le dijo hoy Vicente…
—- ¿Queres que o can se amaricone ou que?
Yo lo cogí por banda y le dije que los homosexuales, sean hombres o perros, merecen un respeto social; pero él siguió con la teima. Cosas de la aldea.
AMOR A TERRA
Una noche en Caracas, el inolvidable Ramón Piñeiro, el de El Portón, me invitó a compartir anécdotas con “Pepe de Redondela”, que ni realmente se llamaba José ni era de la “villa de los viaductos”.
Ese era solo el nombre de batalla del gran cocinero Raimundo Seijas, nacido con el siglo XX en un pequeño lugar de Moscoso, al pie del Suido, y que hoy descansa en paz en el cementerio de la capital venezolana.
Raimundo era entonces cocinero del Hilton y presumía de ser gallego, tanto como de la gente ilustre para la que había cocinado a lo largo de sesenta años en los fogones del continente americano.
Jamás escuché a nadie hablar con tanta pasión de Pazos, de sus productos gastronómicos y de su paisaje. Ni nunca me sonó tan dulce aquel gallego caraqueño, que hablaba Raimundo, “Pepe de Redondela”.
Pazos de Borbén es municipio pequeño de los que trepan hacia la sierra, escapando de la ría de Vigo. Aquí nacieron muchos de los protagonistas de aquella historia nacida de la necesidad. Cuando uno se sienta ante la grandiosidad de este paisaje, es inevitable sentir la presencia de los que están o estuvieron fuera.
Es el mejor sitio para iniciar una buena caminata por el Camiño das Greas, la mayor ruta de senderismo de Galicia.
UN BESO AL DESPERTAR
Es lo más bonito para abordar tu alborada: recibir un beso en la mejilla, cuando aún estás en cama medio dormido y escapando de los malos sueños. Ese sí es un beso de amor, de los muy pocos que recibirás a lo largo de tu vida. Que te despierten con ese inmenso cariño que te profesa un hijo o una hija es lo mejor que te puede ocurrir. Gracias, Betiña, así cualquiera es capaz de contar historias vividas o inventadas.
SI ESTE CUENTO FUERA NOTICIA… ¿QUÉ PASARÍA?
Imagínate que esto -que es un cuento breve- se convirtiese en realidad:
El Rey va a dimitir. Y todos los senadores. Y los diputados provinciales. Y la mitad de los alcaldes y de los concejales…
Además, van a cerrar esas grandes sedes que tienen los partidos y alquilar pisos de esos que los bancos no dan vendido porque están en barrios marginales, cerca de La Cañada Real o así…
Y los sindicatos van a vivir de las cuotas de sus afiliados, que tienen muchos.
Y lo que deben los partidos a los bancos, pues… ¡Lo van a pagar los dirigentes!
Y los banqueros van a devolver al Estado los miles de millones que les dio Rajoy.
Además, van a cobrar el catastro a los curas, que no pagan nada y solo saben pasar el cepillo…
—- ¿Entonces ya no tenemos que emigrar?
—- No, emigrarían los políticos que sobran y su séquito, con lo cual en el extranjero se enterarán de lo cualificados que están…
—- ¿Y tú crees que tragarían?
—- No, pero sería bonito que estas fakes se reconvirtieran en verdades en el TD, en las radios, en los periódicos, en los digitales, en las redes… ¿A qué sí?
Lo mejor para salir de estos enredos políticos es inventar falsar realidades. ¡Prueba tú mismo!
MAS DATOS PARA EL MINISTERIO
Como quiera que llueve he ido al club de los ilustrados para ver si me enteraba bien del objetivo que persigue el Ministerio del Interior con los 42 datos que, -obligatoriamente, por decreto y bajo amenaza de multa de 30 mil euros- han de pedirle a sus huéspedes los hosteleros, los del turismo rural y hasta los arrendatarios de pisos turísticos.
—- Polo visto a norma só é para extranxeiros…
—- É tamén para os galegos si vamos a Madrid…
—- ¡O fan para protexernos!
—- ¿E para iso fai falla darlles o número da túa conta bancaria e o da tarxeta de crédito?
—- ¿E os números de teléfonos?
No solo los profesionales de la hostelería están que trinan desde este lunes pasado; a la gente viajera no le hace ninguna gracia que toda su vida esté en manos de un banco de datos. Como si fueran pocas las cookies y demás secretos que algunos han descubierto a todo dios a través de la Intranet.
Uno ya no está para emprender viajes largos que requieran alojamiento por lo menos para una noche, pero lo que sí os recomiendo es que facilitéis algunos de los datos falsos, así cuando hackeen el Ministerio del Interior estaréis tan tranquilos como nos quedamos los pobres, el otro día, cuando hackearon a Hacienda.
LOS RUMANOS DE LA TERRA CHÁ
Dicen que en Rumanía aún nacen los niños con alma errante porque descienden de aquellos gitanos de noble transitar por la vieja Europa. Es posible, pero me cuesta creer que aquella raza por la que suspiraba la Literatura romántica haya sobrevivido al exterminio nazi, al racismo europeo y al rechazo social generalizado que sufrió ese pueblo, en cuyo espejo se pueden mirar muchos otros, especialmente el nuestro.
A pesar de que su país es una de las grandes sorpresas de los viajeros que buscan cultura en el centro del continente, el pueblo rumano sufre la fama de los países donde se refugiaron los señores de la guerra, de los que se nutren actualmente las mafias que operan por toda Europa y de las que tampoco nos hemos librado los gallegos.
Pero confundir a una treintena de desgraciados con quienes llegaron en busca de la vida a este país es como ver en los gallegos que emigraron a América a los españoles colonizadores, protagonistas de las matanzas de indígenas.
Hoy quiero dar la bienvenida a mi tierra a todos los inmigrantes, vengan de donde vengan, porque con ellos creceremos. Especialmente a los rumanos, gente que trabaja de sol a sol por un salario muy inferior a los que marcan nuestras leyes laborales.
El ejemplo está en Pacios una hermosa parroquia de Begonte, cuyos montes comunales se han convertido en un mar de plástico, en el que la empresa Surexport cultiva fresas, frambuesas y arándanos. Cuando la gente de la zona comenzó a trabajar en los invernaderos no tardaron nada en despreciar el trabajo, “por fatigoso y poco rentable”, según te cuentan los propios begantinos.
Así que la empresa los fue sustituyendo por trabajadores de Rumanía, la mayor parte mujeres, que forman hoy una colonia de un ciento de personas. No sé hasta qué punto influye en la economía de Pacios, pero estoy seguro de que contribuyen modestamente a que este pueblo de la Terra Chá cobre vida y mire hacia el futuro.
Hoy te pido que no despreciemos a nadie por su procedencia, al contrario, tendámosle nuestra mano, que es gente de bien y traen paz. Nada tienen que ver con los soldados reconvertidos en delincuentes.
Por último… ¿Las autoridades laborales se han preocupado por saber si las condiciones de estos trabajadores son las mismas a las que, por ley, están obligadas todas las empresas? La Consellería de Traballo debiera de inspeccionarlas porque mucho me temo que no cumplen con las normas.
SUGERENCIA DE OTOÑO
Viejas crónicas cuentan que fueron los romanos los primeros en descubrir y disfrutar de las Termas de Laias, aguas con propiedades curativas que manaban a una temperatura superior a los cincuenta grados, con un caudal de casi 500 litros por minuto.
Lo cierto es que Laias está ubicada en una zona que se considera muy romanizada, próxima al Castro de Lás. De hecho, Tolomeo sitúa aquí la ciudad de los “turodos”, Aquae Laae. Y Flavio Dextro, cuando habla de las Aquas Quintianas, se refiere también a estos manantiales, ubicados en el barrio de As Quintás.
Estas antiguas termas son el origen de la actual Villa Termal de Laias, uno de los complejos balnearios más interesantes de Galicia. Deberías aprovechar un fin de semana de otoño para comprobar cómo se mira en los espejos del Miño.
Xerardo Rodríguez