galiciaunica Un recorrido semanal por Galicia, España.

FELIZ AÑO NUEVO

Zulema era una bruja que tuve el placer de conocer en mis incursiones por el Sáhara. Al contrario de su gente, que vivía en “jaimas”, ella habitaba en una cueva en las montañas negras de Aussert. En una de las muchas que había y en las que por la noche escuchabas como lamentos que partían de entre las piedras, últimas huellas de los antiguos ríos que al secarse agrandaron el desierto.
La bruja Zulema me habló de aquellas montañas como el origen de la maldad que el diablo había sembrado en el planeta y que transmitía por las noches el aliento de un león de fuego que estaba a su servicio en este mundo.
No sé si creer a Zulema en esta era de guerras y catástrofes que nos toca vivir, pero algunas personas, de las que salen a menudo en los telediarios, se han convertido en bárbaros con instinto caníbal.
¿Será verdad que el diablo, desde Aussert, en el corazón del Sáhara, contagia de maldad a los humanos, como me decía Zulema?
Algo está pasando para que el mundo se llene de odios, abunden las enfermedades sin remedio, la droga nos invada, la avaricia prime sobre los principios morales, las bombas sigan matando a la gente inocente y algunos hombres pisoteen de la manera en que lo hacen a otros hombres.
Realmente, hay mucha gente mala haciendo daño a los demás, Zulema. Puede que sea cosa del diablo y del aliento malicioso del león de fuego de Aussert. No hace falta más que darse un baño de actualidad para ver como el brindis con champagne del caro que elevamos el otro día a modo de plegaria no cambió nada y los buenos deseos en todos los discursos se quedaron en solo eso, en buenos deseos.
Pero añado otro por si se cumple:
— ¡Que la felicidad sustituya al dolor en este 2025!


Xerardo Rodríguez