galiciaunica Un recorrido semanal por Galicia, España.

JAVIER GÓMEZ NOYA

EL SUPERMAN GALLEGO

 

            Viernes, 27 de Julio. Esta tarde en Londres se inician los XXX Juegos Olímpicos de la Era Moderna y la Galicia del deporte mira hacia la capital inglesa con los ojos puestos, de manera especial, en su “superatleta”: Javier Gómez Noya.

            Tiene el mejor palmarés de cuantos deportistas representan esta vez a España, con sus doce copas del mundo y tres campeonatos europeos de la especialidad, entre un sinfín de trofeos conquistados.  Ya estuvo en Pekín y esta vez es la gran esperanza para la conquista del oro olímpico, aunque su modestia sea tan grande como sus logros deportivos:

             —-  En Pekín llegaste el cuarto… ¿Son diferentes estos juegos?

             —-  Muy diferentes. Hace cuatro años yo era el favorito y salí muy presionado pero en Londres los que tienen la “obligación” de ganar son los hermanos Brownlee, Alistair y Jonathan. Yo espero estar en el pódium. Tengo mucha confianza en mis posibilidades.

             29 años. Nació en Basilea (Suiza), hijo de la emigración, pero se siente ferrolano porque fue en la ciudad departamental en donde creció. Iba para ingeniero de caminos pero el deporte le tiraba más y abandonó los estudios. Suele pasar.

              En esto del triatlón comenzó en 1998 y todos recordamos a aquel chico que había vencido entonces al gran Iván Raña, gallego de Ordes, el mejor de los mejores hasta entonces. Pero…

              Un año después, los servicios médicos del Consejo Superior de Deportes le detectaron una anomalía cardíaca y el CSD le retira la licencia. Javier Gómez Noya no se resigna y tras consultar a varios especialistas que discrepan de los médicos “oficiales” emprende una lucha por recuperar su status como triatleta, que resulta todo un calvario…

               —-  Hay una fecha que no olvidarás nunca, Javier…

                —- Sí Noviembre del 2003. Fue cuando recuperé la licencia internacional.

               Tuvo que ser, precisamente, un prestigioso cardiólogo inglés quien, con su intervención ante la Federación Internacional, convenció a los sesudos federativos. Y con solo tres semanas de entrenamiento, Javier Gómez Noya conquista su primer gran título: el Mundial Sub-23.

               A partir de entonces, como te decía, su carrera está plagada de éxitos internacionales y jamás sufrió ninguna lesión cardíaca. Aquella lucha contra el CSD fue tan tenaz como sus brazadas nadando, sus pedaleos en bicicleta o sus veloces carreras pedestres, las tres modalidades deportivas que endurecen la especialidad del triatlón, aunque para Gómez Noya resulte un simple “paseo”.

     

              Lleva una semana y pico en casa, donde ha bajado el volumen de entrenamiento para llegar descansado a Londres, a donde viajará el próximo viernes, día 3.

               — ¿Y cómo es el circuito olímpico que te espera?

               — Yo hubiera preferido un tramo ciclista más exigente porque el ciclismo es el que pone a cada uno en su sitio, pero será llano. De todas formas, en triatlón, hay que estar fuerte en todo: nadando, pedaleando y corriendo.

               — Dicen que puede llover… ¿Te favorece?

               — En Vancouver gané con lluvia pero influye más el factor suerte, porque suele haber caídas. Claro que es igual para todos. Si vas bien colocado en el pelotón, mejor.

               — A ver. En este momento firmarías una medalla…

               No firmo nada porque aspiro a lo máximo. Yo voy a competir y que cada uno demuestre lo fuerte que está…

               Javier Gómez Noya, el “superman” gallego, va a conquistar ese oro, estoy seguro. Porque tiene fuerza y muchas ganas de ganarlo.

               Para mí es… ¡Un personaje único!