JERÓNIMO LÓPEZ MARTÍNEZ, CIENTÍFICO.

“El deshielo en la Antártida, tardará”

       Jerónimo López Martínez es un “madrigallego”, como diría mi buen amigo Carlos de Blas, nacido en As Pontes hace 62 años, nada menos. Su gente insiste en que aprovechó bien el tiempo y tal vez por ello sea uno de los geólogos de mayor prestigio en el mundo y el gran especialista en la Antártida, “un lugar distinto por sus hielos, luces y animales”.

       También es profesor de Geodinámica Externa de la Universidad Autónoma de Madrid y aunque pocos se acuerdan, a los 30 años escaló el Manaslú, una de las cumbres más difíciles de la cordillera del Himalaya…

        —- Aquello fue toda una experiencia sobre todo por el material que utilizamos. Llevábamos piolets de madera y botas de cuero. Entonces no había forros polares ni tejidos goretex. Hoy se sube a la montaña de forma más rápida y segura…

        Empezó a ir a la montaña cuando apenas había cumplido diez años y a los catorce ya empezó a escalar para, poco a poco, lograr cumbres más complicadas… Siempre le ha gustado la Naturaleza y siente especial predilección por tres lugares…

        —- En el Himalaya, el Karakorum. En Los Andes, la parte del Perú y también la Patagonia. Y en España, los Picos de Europa.

         El profesor López Martínez es presidente del Comité Científico de Investigación Antártica en España y, al margen de otros muchos galardones, le concedieron el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional, en el año 2002. Los que le conocen bien dicen que es un personaje único, porque entre otras cosas ejerce de “conciencia del planeta”.

          —- Algunos agoreros dicen que en el 2015 –que está a dos vueltas de calendario- ambos polos van a descongelarse…     

          —- No es posible que todo el hielo de la Antártida se haya deshelado para esa fecha. El plazo es más largo. Los ritmos de desaparición de hielo están siendo más rápidos en el Ártico y, en la Antártida, dentro de lo que es la península Antártica. Pero hay mucho hielo. Esa fecha la apuntaron algunos investigadores porque, hacia el 2015, podríamos asistir a un océano Ártico sin hielo, a finales del verano, pero solo en el mar.

          —- ¿Y qué pasaría si se fundiera todo el hielo de la Antártida?

          —- Pues que el nivel del mar subiría 66 metros. El espesor medio del hielo es de 2’2 kilómetros, lo que nos hace pensar que no se fundirá a corto plazo.

          —- ¿Cree usted que se respeta lo suficiente el “continente de hielo”?

          —-  Sí, allí sí. Los acuerdos internacionales lo protegen. Pero hasta la península Antártica las agresiones llegan desde lejos. Le afecta todo lo que transmitimos los hombres a través de la atmósfera. El planeta está interconectado a través de los océanos y de la atmósfera, por eso llega allí todo cuanto hacemos en el medio natural.

          —- ¿Hasta qué punto ustedes, los científicos, pueden evitar males mayores? ¿Cómo conseguimos frenar el cambio climático?

          —-   Los científicos buscamos el porqué suceden las cosas. Ese es nuestro papel. Pero, en relación con el cambio climático, la ONU es el organismo que informa a los políticos y estos son los que tienen que tomar las decisiones más adecuadas. Hay evidencias de responsabilidad humana en el cambio climático y 113 países las han asumido.

          —-  ¿Cuáles son esas evidencias?

          —-  Desde hace un siglo y medio los humanos estamos interfiriendo de una manera notable los ciclos naturales y la etapa natural de calentamiento en la que vivimos actualmente se ve reflejada por los efectos derivados de la actividad humana en el planeta, como es la emisión de gases de efecto invernadero. Tiene mucho que ver la superpoblación mundial existente. Hay que corregir ciertas actuaciones por el propio futuro del planeta. Es complejo.

          —-  ¿Y cómo está la Galicia Natural? ¿Goza de buena salud?

      —-  Galicia posee un medio natural extraordinario, nada estropeado y con muchas posibilidades de ser salvado. Debiéramos estar muy atentos para no cometer los errores que se han cometido en otros lugares, como por ejemplo la Costa Mediterránea.