LOS VIKINGOS
Por Raquel Sertaje Nogueira
Con un café bien calentito para combatir el frío danés, me resguardo dentro del Museo Vikingo de la de la nieve que aún cae por estas latitudes. Es en Roskilde, antigua capital danesa, en donde los más curiosos viajeros pueden visitar la catedral en donde están enterrados todos los reyes daneses y, si aún les queda tiempo, acercarse al museo Vikingo para ver las viejas embarcaciones en la que esta fascinante tribu Escandinava emprendía sus viajes por el Atlántico.
Esta es la tercera vez que visito el Museo. Culpo a de ello al encanto de esta pequeña ciudad danesa y a History Channel, ya que desde 2013 viene deleitando a su audiencia -y muy especialmente a mi- con las aventuras de la intrigante tribu vikinga. En Vikingsel InglésMichael Hisrt,responsable deElisabeth, Los Tudores y Camelot, revive las andanzas de esta extinguida sociedad del Norte de Europa, despertando nuestra imaginación y sed de conocimiento de unos tiempos oscuros y fascinantes en los que dioses paganos campaban a sus anchas por Escandinavia, y los Vikingos campaban a la suya por donde las olas y mareas querían llevarlos.
¿QUIENES ERAN LOS VIKINGOS?
Primitivas lenguas Escandinavas definían vikingr como pirata. Otro término semejante del antiguo Norse, viking, hace referencia al acto de saquear o realizar incursiones violentas en territorios extranjeros. Aunque solemos generalizar y creer que vikingos eran todos los que poblaban la zona conocida actualmente como Escandinavia –entidad cultural que sólo apareció a finales del s. XIX-, lo cierto es que el término vikingo debería aplicarse exclusivamente a aquellos hombres involucrados en semejantes empresas y no a cada granjero o artesano escandinavo. Creo que aquí procede un sonoro: “Qué alivio, macho”.
Según la leyenda, losHombres del Norte (Norsemen) eran fieros guerreros, tan amantes de la lucha como de la aventura. Su impacto en Europa es innegable, ya que no sólo se dedicaron a robar y espoliar lo que se topaban en su camino, sino que también fueron hábiles comerciantes. En el Este de Europa se los conocía por el nombre de “Rus”, vocablo del que proviene el actual nombre de Rusia, y en Constantinopla sirvieron como la guardia real del Emperador.
Las primeras incursiones vikingas hacia el Oeste de Europa se realizaron hacia el año 793, durante el reinado de Beorhtric de Essex. Tras la primera invasión de las Islas Británicas, los vikingos continuaron moviéndose hacia el Oeste, llegando a Irlanda e Islandia y, probablemente ayudados por una buena corriente y sus rudimentarios conocimientos de navegación, a América. Ningún escandinavo dará el brazo a torcer con lo de Colón. Ellos no lo dudan ni por un segundo: Los primeros europeos en llegar al viejo continente fueron los vikingos.
Entre 960 y 980 Harald Bluetooth –sí, el app Bluetooth de nuestros móviles fue inventado por un danés y, consecuentemente, lleva el nombre de un Rey Vikingo- convirtió a Dinamarca al Cristianismo. Semejante hazaña no sólo derrocó a Odín y su imperio del Valhalla, sino que se convirtió en el factor decisivo que hizo posible que Escandinavia pasase de la temprana a la Alta Edad Media, haciéndose irrevocablemente europea, tal y como lo entendemos hoy en día.
Convertir a estos pueblos al cristianismo fue un movimiento político más que espiritual, ya que la Iglesia Católica, caracterizada por su centralismo político y religioso, era a todas luces una ventaja para el monarca, ya que le permitía aglutinar el poder alrededor de su persona en lugar de tenerlo esparcido entre los diferentes señores y lores. Prueba de que este fue un movimiento estratégico es que, mil años más tarde, en 2015, Islandia construye un templo en el que adorar de nuevo a los antiguos dioses nórdicos. Quien tuvo…
LOS VIKINGOS EN GALICIA
Hoy en día podemos encontrar rastros de presencia vikinga en las Islas Británicas, Islandia, Bizancio, Roma y por supuesto, también en Galicia. Jakobsland (Tierra de Santiago) era el nombre por el que los antiguos vikingos conocían a nuestra tierra.
Las primeras incursiones vikingas en Galicia datan del siglo VII y VIII aunque fueron más numerosas en el s.X, cuando el propio Obispo Rosendo de Mondoñedo tuvo que hacerles frente. Básicamente, se trataba de incursiones en las que los vikingos se dedicaron a poco más que espoliar y saquear los pequeños poblados que encontraban a su paso y a los pobres diablos que se cruzaban en su camino. Lo cierto es que apenas hubo asentamientos vikingos en Galicia.
A pesar de que los lugareños les hicieron frente y los derrotaron, los vikingos no desistieron y durante algo más de 300 años continuaron atacando no sólo las costas gallegas, sino que se adentraron mar adentro, llegando hasta Lugo. Aunque su presencia en Galicia fue más bien esporádica, lo cierto es que fue suficientemente notable como para que se erigiesen murallas para contrarrestar sus ataques y proteger a las poblaciones del lugar. De hecho, los vikingos fueron los principales causantes de que se cambiase la sede religiosa de Iria Flavia a un terreno más seguro y alejado de la costa: Santiago de Compostela.
No fue hasta el siglo el siglo XI que los nórdicos comenzaron a visitar Galicia más como peregrinos que como saqueadores. Un ejemplo de ilustre peregrino fue el rey Sigurd de Noruega, quien visitó Santiago en otoño del 1108. Todavía hoy el Camino de Santiago despierta pasiones por estos lares. Personalmente conozco a varios daneses que lo han hecho o quieren hacer, y hace unos años leí en un periódico que los noruegos estaban restaurando antiguos barcos vikingos para hacer la peregrinación a la vieja usanza. (La travesía marítima que unía Escandinavia a Galicia tardaba en hacerse aproximadamente una semana).
Después de más de 1000 años, daneses de Frederikssund, una pequeña población cercana a Copenague, viajan cada año a Catoira invitados por su ayuntamiento para participar en la romería del Desembarco Vikingo. Supongo que nos sigue fascinando esa tribu de guerreros anárquicos más sedientos de aventura que de oro. Y es que ya se sabe:Odín los cría y ellos…