UN CANTO DE GUERRA
Por J.J. García Pena
Viejos discos recuperan toda su vigencia ante este nuevo drama humano. De hecho, nunca la perdieron. Guerra hubo y hay todos los días, pero es cosa de otros, según creemos. Salvo que ahora (como en 1914 y 1939) peligra el núcleo del mundo «civilizado», «creyente» y blanco. Gardel nos relató el horror de la primera guerra, e Iva Zanicchi el horror corregido y aumentado de la segunda. Esas -como la de hoy, tan cerca de nuestra barbacoa- sí nos preocuparon. África, después de nada, es lejana y ajena a nuestra piel y creencias. ¿Observaste que hasta parece que, súbitamente, ya no hubiese más pateras ni ahogados en el Mediterráneo ni en las costas de las Islas Afortunadas? ¿Quién le cantará a todas las guerras que, por nuestro primitivismo mental, aún nos aguardan? Monos ladrones, belicosos y sin Educación somos.