galiciaunica Un recorrido semanal por Galicia, España.

LOS POETAS DEL MAR DE VIGO

Fue esta orilla marinera espacio común para poetas aquí nacidos y aquí llegados.
Los primeros, como Xohan de Cangas, Mendiño o Martín Codax, ensalzaron esta Ría encantada con emocionadas cantigas medievales, dedicadas a San Mamede do Mar, al pequeño refugio de San Simón o al vaivén de las ondas que distraen nuestra mirada.
“Cuantas sabedes amar amigo… traedes conmig’a lo mar de Vigo”

A illa de San Simón inspiró los versos de Martín Códax

El viejo y entrañable maestro José María Castroviejo, con el que compartíamos  pasión por las doradas horas del sol poniente sobre el mar,  desde el absoluto silencio del Monte do Facho, describió   asombrado el hostil  batir de las olas atlánticas contra los acantilados de la Costa da Vela…

“…Creaba el mar misteriosas cuevas, donde se asentaban miles de aves, y pozos de espuma que escalaba la roca hasta nosotros”.

Castroviejo gustaba de la Costa de la Vela

Celso Emilio Ferreiro puso versos de amor y embrujo  a la legendaria historia de la meiga…

“…Nos areales de Cangas muros de noite se erguían:  ¡Ai, que soliña quedaches, María Soliña!”

Celso Emilio cantó a la mitológica María Soliña

Carlos Oroza, paseante solitario y bardo del amor libre, soñó con una musa, errante y desnuda,  en la Playa de Liméns…que aspiraba…

“…El perfumado aire salobre de la dulce playa, respirando el viento de algas, yodo puro que emana del maravilloso vaivén del agua cebrada…”

Carlos Oroza respiró versos de salitre en Limens

Y Bernardino Graña, poeta de la palabra verdadera y voz mariñeira, vió en este mar de Cangas a su propia estirpe:

“O mar mais longo é o meu sangue. O mar mais fondo é esta canle por onde eu vou…”

Las lanchas de la estirpe marinera de Bernardino Graña.