galiciaunica Un recorrido semanal por Galicia, España.

PEDRAFITA DO CEBREIRO, META DE PEREGRINOS

       Hay una senda bonita que atraviesa los pequeños montes y los valles verdes del territorio de Pedrafita do Cebreiro, que es también parada y fonda del Camino a Compostela, en la que el peregrino reafirma su fe.

       Recorre un trayecto de soutos y fragas, entre las montañas de Ancares y O Courel; y pasa por lugares hermosos, provocando el rumor del agua del río, que realza con su humedad los vivos colores de esta época veraniega.

       También pasa la senda bonita por aldeas de media montaña ya próximas al paraíso, donde te ofrecen el más sabroso de los quesos, para que sientas de cerca la refulgente calma del país.

       Es la puerta que Galicia abre a la meseta, tanto para los peregrinos a Compostela como para quienes utilizan la Autovía del Noroeste que enlaza Madrid y A Coruña.

       De inviernos fríos de nieve y veranos calurosos, como en las sierras, Pedrafita pertenece a la comarca de Ancares, por lo que su configuración geográfica es de un relieve ondulado, compuesto por montes y valles profundos, surcados por ríos de montaña de rápido y limpio curso.

       Su historia siempre ha estado vinculada a las peregrinaciones a Compostela. Por eso es Pedrafita do Cebreiro.

       O Cebreiro es el lugar donde supuestamente ocurrió el milagro del Santo Grial pero que, aún sin milagros, es el gran emblema del Camino Francés en Galicia y posee un alto valor histórico, con un  pasado medieval todavía visible en la Iglesia de Santa María la Real y en toda la aldea, recuperada en el año 1993.

    Porque este templo de O Cebreiro es la iglesia más antigua del Camino de Santiago. Fue construida a mediados del Siglo IX por los monjes benedictinos. A pesar de las diversas reformas, aún conserva parte de su factura prerrománica, con planta basilical de tres naves cubiertas de armadura de madera que finalizan en ábsides rectangulares.

     En el exterior, destaca la torre y los muros exteriores, todos de granito con lajas de pizarra.

    En su interior tuvo lugar el Milagro del Santo Grial, milagro que fue difundido por los peregrinos a todos los rincones de Europa y que paso a contarte.

 

      Según la tradición, a principios del siglo XIV, existía en la aldea de Barxamaior, a varios kilómetros de O Cebreiro, un devoto campesino llamado Juan Santín. Este siempre asistía a la misa en la iglesia que los monjes benedictinos regentaban junto al hospital de peregrinos.

      Era un día de gran tempestad y Juan, como tenía por costumbre, subió desde su aldea hasta O Cebreiro, llegando a la iglesia en el momento en que el monje estaba consagrando un pedazo de pan y un poco de vino. El oficiante,  incrédulo, al verlo llegar, exclamó:

      — Cual viene éste otro, con una tan grande tempestad y tan fatigado, a ver un poco de pan y vino.

      En ese momento, el pan que sostenía se transformo en carne de Cristo y el vino en su sangre, produciéndose el Milagro del Santo Grial.

     En 1486 los Reyes Católicos peregrinaron a Santiago, haciendo parada en O Cebreiro para contemplar el milagro y donar el relicario donde se guardan los restos. Hoy lo podemos contemplar en la capilla del Santo Milagro junto a la patena, y el Cáliz, símbolo de Galicia y presente en su escudo. Ambas son piezas románicas del Siglo XII.

     Los mausoleos donde están enterrados los protagonistas del milagro y una talla románica de la Virgen del Siglo XII completan la vista a esta capilla, un verdadero conjunto Histórico-Artístico.

         De los bosques verdes de este municipio lugués sale la madera de carballo en los que envejece uno de los wiskys “de Malta” más cotizados de Escocia, el “McCallan”. En sus verdes prados pastan las vacas guapas que proporcionan la leche para uno de los quesos de mayor fama de Galicia, el denominado, también, de O Cebreiro. Y aunque el Camino de Santiago es sin duda la gran senda que siguen miles de peregrinos cada año, hay otros.

       Por ejemplo la conocida “Ruta del Milagro”, que primero baja hasta al río para luego ascender por una fraga magnífica que casi llega a O Cebreiro.

        Otro lugar magnífico es el Pozo do Lago Mayor, que está apenas a dos kilómetros, de Hospital. Se trata de una laguna de 100 metros de largo por 25 de ancho. Para llegar simplemente hay que seguir el cauce de un pequeño regato, que te regala su canción de agua.

        Pero si eres amante del senderismo y te gusta ese contacto con la Naturaleza para procurar perspectivas únicas, al abandonar Pedrafita procura el río Loúzara y encuentra su Valle, uno de los enclaves paisajísticos más admirables de la Galicia interior. Este río, afluente del Lor que a su vez lo es del Sil,  nace en Louzarela, en O Courel y hace tiempo alimentaba viejos molinos a lo largo de su curso, incluso los que utilizaban las gentes de las aldeas de la sierra.

     Algunos caminantes que siguen la ruta xacobea, al llegar al alto do Poio no resisten la tentación de acercarse hasta Louzarela; y seguir el curso del Lóuzara desde esta parroquia hasta la de Lousadela, que es entre estos dos pueblos por donde se extiende el valle más hermoso que se pueda admirar en todo el Lugo verde.