EL CASO NOÓS, UNA HISTORIA DE ALTA CORRUPCIÓN.

¿SE SENTARÁ EN EL BANQUILLO LA INFANTA CRISTINA?

Eso es lo que se pregunta mi gente tras conocer las peticiones de la Fiscalía Anticorrupción que solicita más de cien años de prisión para catorce de los veinte imputados en el Caso Noós. El asunto parece estar listo para que se celebre el juicio oral en menos de seis meses, después de que, esta semana, el fiscal Pedro Horrach presentase en el juzgado número 3 de Palma de Mallorca el escrito de calificación, de más de 500 páginas.

Para  Iñaqui Urdangarín la Fiscalía solicita entre 18 y 20 años de cárcel y para su exsocio, Diego Torres, entre 16 y 17.

Anticorrupción opina que la Infanta Cristina no cometió delito alguno, aunque sostiene que “esta habría obtenido un beneficio ilícito de los fondos supuestamente defraudados por Urdangarín en el seno del anterior entramado societario; y más en concreto a través de una de las sociedades mercantiles “pantalla” que integraban el conglomerado empresarial: Aizoon”.

Es decir, únicamente “Manos Limpias” y el juez Castro quieren sentar en el banquillo a la Infanta. La acusación popular ya anunció que pedirá ocho años de prisión para Cristina de Borbón que, eso sí, para Horrach es responsable civil conjuntamente con su marido, por lo que tendrá que pagar una fianza de poco más de medio millón de euros.

La acusación dice que Urdangarín y su socio Torres “crearon y lideraron una trama de desvío de fondos públicos, beneficiándose ambos de casi seis millones de euros”.

Esta noticia devolvió al primer plano la discusión pública sobre si la Duquesa de Palma debería de ir o no a prisión. Yo no creo que vaya a suceder y algunos comentaristas de este país, con todo el morro,  opinan que Isabel Pantoja ya es ejemplo suficiente para acallar voces.

Pero también hay que fijarse en un párrafo del escrito de calificación de la Fiscalía:

 “La solicitud de pena para el Duque y otros inculpados podría variar in extremis en caso de que, a última hora, decidan hacer frente al pago de las cantidades presuntamente malversadas en Baleares, Comunidad Valenciana y Madrid; y con ello asuman su responsabilidad en los hechos”.

Es decir, que, según la Fiscalía, tanto Urdangarín como Torres podrían ver sus penas sensiblemente rebajadas si devuelven entre ambos esos seis y pico millones de euros malversados.

Estos son los hechos que acontecieron esta semana pero la historia de este caso tiene mucho trasfondo.

Fíjate en la lista de…

IMPUTADOS:

IÑAQUI URDANGARÍN. Como yerno real, fue el elemento decisivo en la trama. Según los correos intervenidos por el juez Castro puede considerarse el cerebro de la trama. Sin él Noós no hubiera existido.

DIEGO TORRES. Fue el técnico que tejió la red de sociedades creadas para desviar los fondos públicos y privados a paraísos fiscales. Fue profesor de Urdangarín.

ANA MARIA TEIJEIRO. La mujer de Diego Torres, responsable del área fiscal y jurídica de Noós. Está imputada desde el 2011 pero pidió el mismo trato que se le da a la Infanta Cristina.

MIGUEL TEIJEIRO. Cuñado de Torres, socio del bufete de abogados Torres & Teijeiro y encargado del funcionamiento de todas las empresas de la trama.

MARCO ANTONIO TEIJEIRO. Hermano de Miguel y encargado de llevar la contabilidad de Urdangarín. Fue el encargado de inventar contratos y cargar gastos personales del “Duque”.

JAUME MATAS. Expresidente del gobierno balear, uno de los principales cargos que financió a Urdangarín. Declaró que financió sus “actos” con 2,3 millones de euros porque pertenecía a la Familia Real.

JOSE LUIS BALLESTER “PEPOTE”. Medió ante Matas para que su amigo Urdangarín consiguiese los contratos. Era director general de deportes del gobierno de Baleares.

JUAN CARLOS ALÍA. Director del Instituto Balear de Turismo en aquella época, financió al equipo de ciclismo Balears-Banesto que gestionaba el Instituto Noós.

GONZALO BERNAL. Exdirector de la Fundación Illesport firmante de los dos convenios por importe de 2,3 millones de euros entregados a Nóos.

MIGUEL ÁNGEL BONET. Exsecretario de Ibatur. Ya fue juzgado por la Audiencia de Palma por apropiarse de 95.563 euros de fondos públicos, simulando contratos de servicios que nunca se prestaron.

LUÍS LOBÓN. Exsecretario de Proyectos Estratégicos de la Generalitat Valenciana. Pidió anular su imputación alegando que los contratos con Nóos fueron avalados por distintos organismos del Ayuntamiento de Valencia y por la Generalitat, como la Fundación Turismo de Valencia Convention Bureau y Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia (CACSA).

JORGE VELA. Exdirector del Instituto Valenciano de Finanzas y exdirector de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia. Firmó el convenio para la organización del Valencia Summit según contó al juez, por orden de Gerardo Camps, presidente del Consejo de Administración de CACSA.

JOSE MANUEL AGUILAR. Exdirector de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia. Firmante de uno de los convenios del Valencia Summit, justificó la ausencia de expediente administrativo,  pese a que el importe superaba el millón de euros, “porque Urdangarín tenía la exclusividad del proyecto”.

ELISA  MALDONADO. Responsable jurídica de CACSA falseó un informe para aportar legalidad y credibilidad a los contratos del Valencia Summit con Noós. Según ella, por orden de Jorge Vela.

LA INFANTA

CRISTINA DE BORBÓN. Imputada por el juez Castro y desimputada por la Audiencia de Palma. Tras declarar ante el titular del número 3 de Palma, vuelve a imputarla Castro y la acusa de presuntos delitos de fraude fiscal y blanqueo de capitales.

Como recordaréis, su declaración ante el magistrado el 8 de febrero pasado causó una gran controversia al asegurar la Infanta que “no conocía la trama en la que andaba su marido y aseguró que se fiaba de todas las decisiones que tomara su esposo, aunque afectaran a su patrimonio personal”. Ahora, como te decía, el fiscal solo pide para ella el pago de una multa de medio millón y pico de euros. Y al no haber ni denuncia de los afectados, entre los que se encuentra la Agencia Tributaria,  ni acusación pública contra ella… será difícil que se siente en el banquillo. 

LOS DESIMPUTADOS

Carlos García Revenga, secretario de las infantas. Mario Sorribas, apoderado de Urdangarín. Luís Teijeiro, uno de los cuñados de Torres. El “testaferro” Robet Cocks. El asesor fiscal Salvador Trinxet. El empresario Miguel Zorío. Miguel Villa, director general de la fundación Madrid 2016. Gerardo Costa, director financiero de la misma entidad. Y el vicealcalde de Valencia, Alfonso Grau.  El juez Castro archivó las causas de todos ellos mediante sobreseimiento provisional.

Esta historia del Caso Noós es la viva demostración de la que “la justicia no es igual para todos”, como dijo en su mensaje de Navidad 2013 el entonces Rey Juan Carlos I. Los políticos que estaban al frente de la Comunidad de Valencia y del Ayuntamiento,  cuando se concedieron a Noós los millonarios contratos ilícitos, se van de rositas. Porque no me creo –nadie se lo cree- que Urdangarín haya “negociado” con el segundo o tercer nivel de mando asuntos tan “importantes”.

A mí me faltan nombres en esta lista… De todos los imputados, solo Jaume Matas puede considerarse realmente un político. En el juicio, seguramente se pondrán encima de la mesa los nombres de quienes lideraban en Baleares, Valencia y Madrid las instituciones implicadas en los negocios ilegales de Urdangarín y Torres.