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RAJOY Y EL PROBLEMA CATALÁN

MAS-RAJOY+

Habla esta gente del PP de los silencios, el inmovilismo o la falta de reacción del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ante la tomadura de pelo de una consulta en Cataluña que aún sigue celebrándose, en la que hubo gente que votó hasta tres veces y que, aún así, significa que solo un tercio de los catalanes quiere habitar la “República Independiente de su Casa”.

Están furiosos estos “peperos” que se posicionan políticamente mas a la derecha que el ínclito Aznar, aquel de la guerra en el Golfo… pero de la paz contra los golfos.

—- Están que muerden ante la pasmosa tranquilidad del presidente,  en estos gravísimos momentos  en los que Cataluña ha dado su primer paso para la secesión.

Yo os digo que esa gente, no entiende a Mariano. No. No sabe que con su pachorra pontevedresa es capaz de mover los hilos de las marionetas del Estado como si estuviera jugando a las muñequitas de su infancia y sabe esperar, esperar, esperar… ¡Esperar a que el rival cometa el error que justifique que una de sus marionetas le ataque sin piedad!

Artur Más tampoco conoce a Rajoy y le echó un pulso con esta verbena de la consulta, que asumió personalmente como responsable de los elementos indispensables para la celebración del conato de referéndum.

Y una de las marionetas de Rajoy, ahora, busca inhabilitar a Más presentando una querella contra él, querella que extiende a su vicepresidenta y sus consejeros de Interior y Educación.

El presidente español montó a caballo como si fuese Napoleón esta semana.  Primero, utilizando a la Fiscalía con la idea de inhabilitar a Más y a su gente por prevaricación, desobediencia al Tribunal Constitucional e incluso por malversación de fondos públicos. Luego saltó al ruedo en Moncloa con los medios de comunicación como testigos de la faena. Y finalmente, se volvió a sus dependencias para esperar; esperar… y desesperar a su partido y a los contrarios.

Rajoy rompió ya, hace tiempo, la baraja del diálogo y está reorientando el desafío independentista por la vía del ataque judicial. Yo creo que se equivoca y que lanzar a su fiscal contra Más es una mala respuesta al 9N, sobre todo si quien apura la acción es la líder del PP catalán, dejando entrever que el sector más facha del PP es el que comanda esta guerra.

Si quedó claro el domingo pasado que el independentismo no es lo que quiere el pueblo catalán, el gobierno español ha de darle una salida a este conflicto que no supo evitar con el diálogo. Sobre todo teniendo en cuenta que si no lo hace, se le pueden abrir otros frentes en Euskadi y en Galicia. Quizá incluso en Andalucía.

Así que llegó el momento para el presidente español de pasar unos días en Camariñas y aprender la técnica del encaje de bolillos. A lo mejor después, nos pone de acuerdo a todos reformando la Constitución e invitándonos a votar un Estado Federal, ese  que dice Pedro Sánchez debe ser nuestro futuro.